El feroz cruce mediático de Pampita y Mariana Brey no quedará solo en el ámbito de los medios de comunicación. Esta mañana, la panelista de LAM contó que demandará penalmente a la modelo tras verse afectada por un tweet que salió de la cuenta oficial de Carolina, pese a que ella sostuvo que fue hackeada.
"No te metas conmigo que sé lo que le hiciste a tu hijo", fue el tremendo mensaje 2.0 que afectó a Brey y a Luca, su hijo de 8 años.
"Estoy a disposición de la Justicia, como he estado cada vez que alguien me ha querido hacer daño. No tengo nada que ocultar. Tengo la conciencia muy tranquila".
"Si lo escribió ella o no, no lo sé, pero está refiriéndose a mí como una mala madre, yo se la dejé pasar un ratito, pero ayer llegué a mi casa lo vi a mi hijo muy angustiado... (Si no fue ella) lo va a tener que demostrar en la Justicia. Me informé legalmente porque me pareció grave", argumentó Mariana, visiblemente movilizada con el tema.
A pocos minutos del anuncio de Brey, Pampita fue abordada por Pablo Layús, el notero de Intrusos, y respondió sobre la demanda que le iniciará la panelista por extorsión: "Estoy a disposición de la Justicia, como he estado cada vez que alguien me ha querido hacer daño. Siempre he estado a disposición, no tengo nada que ocultar. Tengo la conciencia muy tranquila".
Consultada por la pronta recuperación de su Twitter, la modelo explicó: "Yo soy muy colgada y tengo la misma contraseña en todas las cuentas. ¡Ahora ya no! Ayer me cambiaron todo. A veces te podés meter por una cuenta anexa. A mis cuentas las tengo hace años, pero nunca me había tomado el trabajo de ponerles tanta seguridad".
Lista para ponerle el pecho a la demanda penal que le hará Mariana Brey, Pampita sostuvo que ella, en esta ocasión, no recurrirá a la Justicia: "Yo no voy a tomar acciones legales. Las acciones legales sobre tecnología, internet, las desconozco. Mi mail, que me lo hackearon hace un tiempo, no lo pude recuperar nunca más. Estoy en trámite. El Instagram me lo hackearon varias veces y me lo han devuelto, por suerte, a las dos, tres semanas, vía carta a Estados Unidos. Es un quilombo tremendo".