Luego del susto que despertó su desmayo en vivo en Buenos días, América –el programa que conduce Antonio Laje por América y donde la nutricionista habla de alimentación- Teresa Cóccaro abrió su corazón, habló de su salud y reveló haberse sentido mal con cómo trataron el tema en las redes.
“Vivimos en un país en el que la obesidad y los trastornos de la alimentación son epidemia. Nadie sabe cómo estoy yo y todo lo que me dijeron me podría haber detonado”, comenzó diciendo Teresa en una nota que dio a Agarrate Catalina, el ciclo radial que conduce Catalina Dlugi por La Once Diez.
Además, alertada por algunos comentarios, la entrevistada aclaró que lleva adelante una dieta saludable donde no se priva de nada. También negó ser vegana o vegetariana y señaló que sus pacientes no hacen “dietas”, sino que aprenden a tener alimentaciones variadas y nutritivas.
"Vivimos en un país en el que la obesidad y los trastornos de la alimentación son epidemia. Nadie sabe cómo estoy yo y todo lo que me dijeron me podría haber detonado".
Asimismo, Cóccaro explicó que las bajas de presión se pueden dar por diversos motivos, y condenó los ataques en redes sociales: “Ojo con opinar del cuerpo del otro y hablar sin saber. Lo mío tuvo que ver con la cuestión sanguínea, pero nadie podía saberlo y salir a hablar cruelmente puede ser peor”.
“Que un tema así se haya tratado con tanta crueldad, que hayan hecho humor de mí con los ojos dados vuelta, la verdad que es doloroso y me deja pensando muchísimo sobre la sociedad en la que vivimos. Después, hubo mucha desinformación, hasta se dijo que había tenido un ACV y la verdad que no es así. Me hice todos los estudios y me salió todo normal”, continuó.
"Que un tema así se haya tratado con tanta crueldad, que hayan hecho humor de mí con los ojos dados vuelta, la verdad que es doloroso y me deja pensando muchísimo sobre la sociedad en la que vivimos".
Y cerró, a flor de piel: “Eso me generó muchísima angustia porque mi mamá vio eso en vivo, vive muy lejos, no sabía qué me había pasado y ya en redes y televisión estaban diciendo cualquier cosa. Ante este tipo de episodios, la reacción tiene que ser no asustarse, cuidarse e ir al médico. Yo me había hecho todos los estudios anuales en febrero y, ante este episodio los repetí. Gracias a Dios, estoy muy bien de salud”.