Sin rumbo seguro, a los 18 años, Nicolás Occhiato (27) terminó el secundario y comenzó a trabajar junto a su padre en un corralón de materiales de construcción. Pero ese no sería su destino y, poco tiempo después, decidió comenzar a estudiar abogacía, profesión que no terminó de seducirlo y abandonó.
Curioso por el mundo de la televisión, a los 21 años, Occhiato hizo un casting para ser participante de Combate, reality de canal 9, y desde entonces su tranquila vida en Villa Luzuriaga no solo cambió por completo, sino que Nico descubrió su verdadera pasión, la conducción.
"Cuando arranqué en Combate me di cuenta de que me gustaba conducir, comunicar. Eso era lo que quería hacer y a partir de ese momento me puse ese objetivo. Siempre que me llegaba un proyecto pensaba si me acercaba o alejaba a mi objetivo, que era el de conducir. Yo estoy muy contento con todo lo que fue pasando en mi carrera. Y así lo estoy viviendo y agradeciendo. También soy muy consciente de que hay que trabajar mucho, que hay que dedicarle mucho tiempo, porque no es una carrera fácil y hay mucha competencia", le dijo Nico a Ciudad, recordando el momento exacto en el que descubrió su camino laboral. En ese ciclo, Occhiato también conoció a Flor Vigna, actriz con quien vivió una historia de amor de cinco años y en 2019 llegó a su final.
"EN LA CUARENTENA NO DEJÉ DE TRABAJAR NUNCA, POR SUERTE. PERO YA HACE MÁS DE 80 DÍAS QUE NO VEO A MIS ABUELOS, NI A MIS VIEJOS. ESO ES COMPLICADO. PERO LA ESTOY LLEVANDO BIEN".
Creciendo a paso firme en la conducción, Nico dialogó con este sitio de Tenemos Wifi, programa humorístico que se emite por KZO, y también de Todo puede pasar, el ciclo que comanda en la pantalla de El Nueve. También habló de sus sueños, dejó asomar un poquito de su resguardada intimidad y se refirió a su participación en el Bailando, tras consagrarse campeón en 2019, de la mano de Flor Jazmín Peña, bailarina con quien va a defender el título, cuando la pandemia de coronavirus lo permita.
-¿Cómo estás llevando la cuarentena?
-Bien. La realidad es que no dejé de trabajar nunca, por suerte. Pude seguir haciendo Tenemos Wifi y el programa de canal 9, Todo puede pasar. Así que la estoy llevando bien. Lo que sí se me cortaron son los momentos de ocio, la juntada con amigos y ver a mi familia. Ya hace más de 80 días que no veo a mis abuelos, ni a mis viejos. Eso es complicado, pero la estoy llevando como se puede.
-¿Salir a trabajar te da miedo? ¿Sos obsesivo con los cuidados o lo necesario?
-Me cuido todo lo que me tengo que cuidar, siempre siguiendo los protocolos. Soy obsesivo más de lo normal, pero miedo no tengo. Creo que eso es peor.
"HOY ESTOY SOLO, TRANQUI... UNA MUJER PARA QUE DESPIERTE MI INTERÉS TIENE QUE SER COMPAÑERA, DIVERTIDA Y HACERME REÍR. A MÍ ME GUSTA MUCHO CHARLAR".
-Estar más tiempo a solas nos lleva a una mayor introspección, ¿qué sentís que estás aprendiendo o redescubriendo en este momento?
-El estar solo no me molesta, me gusta mucho estar solo. La verdad, me sirvió para seguir concretando proyectos personales que, por ahí, tenía trabados. Me sirvió para darme más tiempo para mi. Yo venía con un ritmo de trabajo complicado, con muchas cosas, y esto me hizo parar un poco. También me hizo estar más en contacto con mi familia, a través de videollamadas y mensajes.
-Esto de tener más tiempo para vos, ¿en qué lo estás capitalizando? ¿Qué estás haciendo que quizás antes no hacías?
-Tengo más tiempo para mirar una serie o para leer. Y como te digo, pude ir cerrando ideas para proyectos personales.
-En este contexto de pandemia y aislamiento social, muchas personas revalorizan los vínculos. Recuerdo que cuando te separaste de Flor Vigna dijiste que tu energía estaba puesta en el trabajo. ¿Hoy tu energía sigue puesta ahí o te gustaría enamorarte?
-Hoy sigo igual. Estoy solo.
-¿Qué te atrae de una persona para que despierte tu interés?
-Tiene que ser compañera, divertida y hacerme reír. A mí me gusta mucho charlar. Tiene que ir por ese lado.
"Desde que terminé el Bailando, no volví a bailar. Flor Jazmín y Mati Ramos son dos amigos que me dio el certamen. Tengo ganas de que nos divirtamos juntos. Eso es lo que más extraño".
-En plena cuarentena, ¿estás en modo conquista por Instagram, por WhatsApp o tranquilo?
-Cero, estoy muy tranqui.
-Y de apostar nuevamente a una relación, ¿sos una persona que elige un amor monogámico o el poliamor puede ser una opción?
-Normal, por ahora. Lo más tradicional.
-Hace más de un año que te separaste de Flor, ¿es una historia totalmente cerrada?
-Nosotros nos llevamos muy bien y nos tenemos mucho cariño.
-¿Vos creés que se puede ser amigo de una ex?
-Sí, no sé si la palabra es amistad, pero llevarse bien sí se puede.
-Saliendo del plano personal, ¿cómo es salir a trabajar en este contexto?
-Uno sale con todas las precauciones. Somos unos privilegiados de poder salir a trabajar y la gente que mira Tenemos Wifi me expresa en las redes sociales su agradecimiento, porque nosotros hacemos un programa de humor, de entretenimiento, y tratamos en esa hora que dura el programa de sacarlos de esos pensamientos (negativos) que se les pueden venir a la cabeza, que son razonables porque estamos todos viviendo una pandemia. A nosotros también nos encantaría cuidarnos más y quedarnos en casa, pero nuestro trabajo hace que salgamos y lo hacemos muy felices, porque para nosotros también es una distracción hacer el programa y poder encontrarnos entre compañeros. En el programa se vive una muy buena onda.
-Ahora que la mayoría de las personas están en cuarentena, en sus casas, ¿hubo cambios en la audiencia de Tenemos Wifi?
-Sí, al estar más la gente en la casa, el programa creció muchísimo en lo digital. Por YouTube nos miran muchísimo, y también por la pantalla de KZO. Pero esta pandemia hizo que creciéramos mucho, que nos miren más, que el programa llegue a gente que no nos conocía... Estamos yendo mucho para el lado del humor. Los chicos (los humoristas del programa) son muy talentosos. Cada uno está en su mejor momento y eso hace que el programa esté creciendo tanto.
-Tenemos Wife tiene mucho humor, ¿a vos qué te hace reír?
-El humor de Tenemos Wifi me hace reír mucho. Me hace reír el humor sano, simple. Nosotros somos un programa que blanquea todo al aire y cuando algo sale mal, nos reímos de eso también. Jodemos con que parecemos una oficina de producción constante: lo que funciona queda y lo que no, no. Tratamos de que los televidentes sean cómplices de lo que pasa entre nosotros.
-¿Cuánto de Nico persona hay en el conductor que vemos por la tele?
-¡Un montón! Practicamente todo. Yo para hacer el programa trato de ser igual a como soy con mis amigos. De hecho, mis compañeros ya son mis amigos. Soy muy yo conduciendo Tenemos Wifi. Es un programa que nació hace dos años y medio, que tenía mucho de nuestra identidad, y así lo sigo conservando.
-Si no hubieras seguido este camino, ¿hoy qué creés que serías?
-Antes estudiaba Derecho, pero no sé si me veo siendo abogado. Hoy no me imagino siendo otra cosa. Ni sé qué clase de abogado sería.
"Con Flor Vigna nos llevamos muy bien y nos tenemos mucho cariño. ¿Si se puede ser amigo de un ex? No sé si la palabra es amistad, pero llevarse bien sí se puede"
-En vos hay mucho de productor, ¿esa área la vas a explorar en un futuro o no querés correr el foco del conductor?
-Me gusta. Nosotros en el programa laburamos mucho con la producción y yo trato de aportar todo lo que puedo, porque es algo que me gusta mucho. En un futuro, no lo descarto para nada.
-¿Le das importancia al rating?
-Si te digo que no lo miro, te mentiría. Creo que todos los que hacemos tele, lo miramos. El rating es una brújula que tenés, me interesa, pero siempre trato de ser fiel al contenido y a lo que quiero contar en un programa.
-¿Qué es el éxito para vos?
-El éxito es poder trabajar de lo que te gusta y no sentir que estás yendo a trabajar. Es levantarte con ganas de empezar el día con todas las responsabilidades que tengas y que sea algo que te guste. Es ser feliz haciendo tu trabajo.
-¿Cómo imaginás que va a ser tu participación este año en el Bailando, tras ser campeón en 2019?
-Ojalá sea como el del año pasado. Voy a tratar de meterle todo. Es algo que cuesta, pero hay que meterle. El año pasado la pasé muy bien, aprendí un montón. Y se nos dio que ganamos. Eso fue excelente. Pero va a ser igual. Flor (Jazmín Peña, bailarina) y Mati (Ramos, coach) son dos amigos que me dio el Bailando. Tengo ganas de divertirnos juntos. Creo que eso es lo que más extraño.
"El éxito es poder trabajar de lo que te gusta y no sentir que estás yendo a trabajar. Poder trabajar de lo que me apasiona es una bendición y espero poder hacerlo el resto de mi vida".
-¿Le tomaste el gusto a bailar?
-No, la verdad que no. Desde que terminé el Bailando, no volví a bailar.
-Vos y Flor Jazmín le aportaron un aire fresco, familiar, al certamen. Pero este año, si sigue el coronavirus, Conce no va a poder ir al piso, ¿qué te dice ella ante esta situación?
-Mi abuela está como loca. Yo trato de llamarla todos los días, imaginate que para ella no solo es duro ser persona de riesgo por su edad, lo más duro para ella es que no la podamos ir a visitar nosotros, los nietos, la familia. Para ellos, estar encerrados es lo más duro que tiene esta pandemia. Yo le abrí un Instagram, le pido videos para que suba, para que se entretenga con mi abuelo. Yo les respondo, los cargo, trato de mantenerlos distraídos.
-¿Qué metas, sueños, perseguís a futuro en lo laboral?
-En lo laboral quiero seguir creciendo en lo que es la conducción, que es lo que me apasiona; quiero seguir aprendiendo en la parte de la producción y quiero poder seguir trabajando de lo que me gusta. Poder trabajar de lo que me gusta es una bendición y espero poder hacerlo el resto de mi vida.
El divertido detrás de escena de Tenemos Wifi: