Sentada en el auto, con los ojos llorosos y hablándole a la cámara frontal de su celular, Nati Jota relató el desesperante momento que sufrió al no poder ubicar a su hermana durante cinco horas. La joven no contestaba el celular y la periodista fue a buscarla.
"Vos podés creer que yo me tenga que poner así porque mi hermana hace como cinco horas que no responde el celular... Se había ido a hacer las manos a un lugar, le miré la ubicación del iPhone, no respondía y me fui... Y pensé lo peor, el corazón se me salía del cuerpo. Recién respondió, no sé qué carajo había pasado", contó.
"Pensé lo peor, el corazón se me salía del cuerpo. Recién respondió, no sé qué carajo había pasado".
En ese punto, se refirió a los índices de femicidios que no bajan y al miedo que aún hoy sienten las mujeres al salir a la calle. "Qué mundo del orto... ¿Hay que vivir así? Una desesperación. Vivimos escuchando que nos hacen mierda a las minas y que mi hermana no responda el celular... Y que yo me ponga así", agregó.
"Salí como una loca, buscando una ubicación dudosa... Sin saber si había que llamar a la policía. Pendeja del orto... Pero más allá de ella, que no hizo nada del otro mundo, es increíble que si en un par de horas no te responde una mujer... Vos ya... Se me cuidan pibas, eh", agregó, indignada.
"A uno le tocan estas situaciones y caes en la cuenta de que podés ser vos o tu hermana. Cuando es otro no duele menos, pero de verdad pasa...".
Antes de cerrar, ya desde su casa y más tranquila, cerró su descargo con un valioso mensaje. "A uno le tocan estas situaciones y caes en la cuenta de que podés ser vos o tu hermana. Cuando es otro no duele menos, pero de verdad pasa...", cerró, reflexiva.