A Leandro Machín le dicen Botis desde que tenía cuatro años y ese es el nombre que usó para el personaje de las historias que escribió mientras viajaba por varios países de Latinoamérica. Recorría caminos y daba funciones de títeres cantando las canciones que componía, que terminaron siendo las primeras que tocaría el grupo que formó, a su regreso, hace seis años: La Manzana Cromática Protoplasmática.
La historia de la banda no es la típica de una orquesta o de una banda de rock, ni se parece a nada conocido: Botis es un juglar cromático protoplasmático que viaja y va recolectando cromáticos (habitantes del planeta Cromo, que son los integrantes del grupo) por todo el universo. Botis es cromático protoplasmático porque es hijo de una cromática que fue seducida por Nestum, un protoplasmático. El personaje viaja en el Tren de la Vía Láctea, a través del Pórtico Cromático cantando y llevando su música a diferentes destinos (que son los lugares donde toca la banda) pero las fuerzas protoplasmáticas tratan siempre de evitarlo.
Esa es la idea que impulsa la estética y el estilo de esta banda formada por doce músicos (cromáticos) y gente que colabora como asistentes, productores y escenógrafos ( a quienes ellos llaman "Injertos"). "El objetivo primordial cuando formamos la banda fue más que nada ayudarnos a vivir a nosotros mismos cuenta Albondigón (Cristian Toledo), el guitarrista de La Manzana Cromática Protoplasmática-. Para nosotros la música es lo que nos hace levantar a la mañana".
Con una historia tan delirante como base, los shows de la banda no podían ser menos. Cristian "Albondigón" Toledo se queda corto al describirlos como: "coloridos, con canciones que pueden pasar de lo más bailable hasta la introspección de volar con la música a diferentes lugares". En las presentaciones de La Manzana Cromática Protoplasmática se combina música contemporánea, rock, audios de dibujos animados, free jazz, disfraces, ritmos latinoamericanos y hasta, a veces, teatro negro. Los integrantes del grupo representan personajes, cada uno con su vestuario. Albondigón lucha contra las lombrices californianas y todo lo que tenga que ver con lo transgénico, Vaporín (flauta traversa) es una plancha que tiene problemas con el alcohol pero igual lo evapora, también están Menócles (guitarra), Arghul (percusión), Lúpitor (bajo), Sr. Pelele (teclados y acordeón), Forcec Bravo (saxo soprano, saxo midi, flauta traversa,clarón), Pinino Bravo (saxo alto, clarinete, trombón, trompeta, flauta dulce), I-Man (trompeta, trombón), Moho (clarinete) y Chantilly (coros). Los Injertos son: Perillita, Nestum, Josecito, Palmito, Guinche (actuación y escenografía junto a Alexis) y María Soledad Ponte en producción. Sin embargo, los personajes pueden cambiar porque todos los shows son siempre diferentes."Al principio tocábamos cada tres meses porque nos costaba mucho armar el espectáculo recuerda Toledo- . Ahora estamos más dedicados a lo musical y tocamos más seguido".
La Manzana Cromática Protoplasmática acaba de sacar su primer disco El Tren de La Vía Láctea. "Después de seis años teníamos muchas canciones para registrar afirma Toledo-. La placa tiene 14 temas que van desde el valsecito con cuerdas al estilo de antes y tanguero, hasta el carnavalito". La música del grupo está influenciada por el folclore del norte, el jazz de los años 30, Frank Zappa y el fox trot, entre otros ritmos.
El grupo se presenta, hoy, a las 22, en La Trastienda, Balcarce 460. "Vamos a hacer los temas del disco con un cuarteto de cuerdas que participó en el disco y, generalmente, toca con Charly García adelanta Toledo-. Uno de los músicos es Julián Gándara que nos hizo los arreglos de cuerdas que grabamos".
¿Con qué se puede comparar a esta inédita propuesta?. "Yo ceo que lo más parecido a La Manzana son los Les Luthiers señala Toledo-. Salvando mucho las distancias porque ellos son genios y nosotros hacemos cancioncitas, pero se puede comparar el espíritu de usar el humor y los instrumentos más raros que podamos encontrar".