No tuvo mucha suerte cuando se presentó por primera vez en La mejor elección, pero eso no lo detuvo. Nicolás Della Nave se presentó nuevamente al ciclo de El Trece para jugar y buscar pareja, esta vez con Melanie Toy del otro lado.
Dicen que los opuestos se atraen. Por tal motivo, durante toda la transmisión todo indicaba que entre los jóvenes había onda… pero no. Mientras él viene del mundo de la medicina, ella estudia educación física y trabaja en el ejército, en ceremonial y protocolo: “Yo soy un soldado”, afirmó ella, sin pudor. Noticia que el joven se tomó con humor: “Uy, tengo que andar con cuidado si es del ejército”.
En cuanto a las razones que llevaron a la rubia a elegir su profesión, expresó: “Entré por un tema laboral y después me empezó a gustar estando ahí adentro”.
A la hora de la verdad, Nicolás apeló a su sentido del humor para dar a conocer su elección y ver si se daba el famoso chape: “Afirmativo”, se leyó en su papel.
Sin embargo, Melanie fue más tajante y en su caso, escribió un rotundo “No”.
Si bien la cara del concursante habló por sí sola (hizo un gesto de resignación), el conductor lo invitó a que regrese al programa. ¿Las razones? “Si él se anota de nuevo, tiene todas las chances. Por reglas no pasa nada. Él puede volver otra vez porque está buscando algo y no está pensando en quién lo mira, simplemente lo está buscado y eso es algo que sé que cuesta y a mí mismo me puede pasar en la vida, y sé que es algo bueno cuando lo hacen genuinamente”, explicó Guido Kaczka. ¿La tercera será la vencida?