La vida de Sofía Gala (28) transcurrió en los medios a su pesar, dado que Moria Casán siempre se valió de la prensa para exorcizar sus demonios. Así fue que la joven se convirtió en la más polémica de las panelistas del debate de Gran Hermano, y la semana pasada dejó a todos pasmados con la cruda confesión personal: "Es cierto que tuve problemas con la falopa, pero nunca descuidé a mi hija".
"Lo cierto es que cuando iba a su casa en épocas que no eran buenas, lo único que hacía era rezar para tratar de habituarme a esa cosa que me era tan lejana. Llegaba y decía 'Dios mío, ayudame a que todo esto me sea orgánico'. Por las cosas que veía, que no era un desastre, no había alguien inyectándose, botellas vacías ni lo que se supone que debe ser una cosa caótica. No, lo que veía era una vibra extraña y no reconocía a Sofía. Estaba con sus amigos y me parecían todos raros".
Una semana después, la diva también se presentó en Intrusos y completó la historia con su propio testimonio. "Lo cierto es que cuando iba a su casa en épocas que no eran buenas, lo único que hacía era rezar para tratar de habituarme a esa cosa que me era tan lejana. Llegaba y decía 'Dios mío, ayudame a que todo esto me sea orgánico'. Por las cosas que veía, que no era un desastre, no había alguien inyectándose, botellas vacías ni lo que se supone que debe ser una cosa caótica. No, lo que veía era una vibra extraña y no reconocía a Sofía. Estaba con sus amigos y me parecían todos raros", reveló Moria.
Luego, continuó: "Lo único que hacía era escapar. No tenía ni llave, hasta que logré hacerme un juego de llaves. Un día lo necesitó y le alcancé las llaves. Yo sabía que algún día iba a necesitarlas". Entonces, la jurado de ShowMatch explicó cual fue, a su juicio, el motivo del alejamiento de Sofía de los medios: "Creo que hizo el click cuando, con 15 años, tuvo que venir a defender su relación con el novio de 40 años (Marcelo, un médico divorciado). Esa relación se terminó y la vi a ella explicando por qué, creo que se quedó con eso y decidió no mostrar más su corazón. (…) A mí me pareció un hombre extraordinario, me vino a pedir la mano de Sofía a mi casa, sentí que la quería, le hacía bien y la cuidaba. Yo no puedo juzgar una relación por una fecha de nacimiento. Además, si se lo hubiese prohibido, lo hubiera hecho. Para qué le voy a poner piedras en el camino si tuvo la valentía de contármelo. Podría haberlo mantenido clandestino".
"Un día que estaba en crisis, vino a mi programa del bus, que salía por canal Magazine, me dijo 'como me di cuenta de que mi papá (Mario Castiglione) era tan borracho, pensé que algún vicio yo tenía que tener'. Me lo dijo y me quedé muda, ella estaba como enojada".
Atento a las declaraciones de la invitada, Augusto Tartufoli la interpeló sobre la falta de límites que le puso a su hija. Moria no esquivó el cuestionamiento: "Supongo que tengo muchas equivocaciones como mamá, pero siempre me planteé la libertad. Siempre la sobrevolé como helicóptero. Hay que aprender a administrar la libertad, como la energía, es un trabajo arduo que tenemos las dos desde chicas. No me planteé dónde estuve, porque siempre estuve, nunca dejé de estar. Ella eligió irse de casa a los 16 años y yo se lo permití".
Al final, Moria Casán reflotó una estridente frase que le lanzó Sofía Gala años atrás: "Un día que estaba en crisis, vino a mi programa del bus, que salía por canal Magazine, me dijo 'como me di cuenta de que mi papá (Mario Castiglione) era tan borracho, pensé que algún vicio yo tenía que tener'. Me lo dijo y me quedé muda, ella estaba como enojada", cerró, al tiempo que disfruta un presente saludable, donde la prioridad de ambas es cuidarse.