En una entrevista con Los Ángeles de la mañana, Mónica Farro (42) se refirió a su relación de 4 años con Juan Suris, quien terminó su vínculo con ella pocos días antes de recuperar su libertad y tras cumplir su condena en la cárcel. “Los dos primeros años sí teníamos sexo en las visitas higiénicas, los dos últimos ya no. No me gustaba”, confesó.
“Es una habitación con un baño y una cama y el preso la decora en esas dos horas. Vos llevás tus sábanas, tu almohada, tu música, lo que quieras compartir. Vos llevás tus cosas. Tiene una cama y una mesa, vos después llevás la toalla, el jabón, el cepillo de dientes. Son dos horas las que podés estar. Muchas veces vas a intimar y muchas, a tomar mate y a pasar un rato con tu pareja a solas”, recordó la vedette que terminó su relación en octubre de 2017 y hoy tiene planes de casamiento con su actual novio, Leandro Herrera (31).
"Muchas mujeres de otros precios tomaron muy mal que esté ahí, me amenazaron unas cuantas veces. Yo no lo pasé bien en ese momento porque si un preso me miraba, la mujer se enojaba. Las mujeres de los presos son muy posesivas".
“Primero hacíamos una cola, después hacíamos una segunda al aire libre y, cuando llovía, yo pensaba ‘¿qué estoy haciendo acá, mojándome por este tipo?’”, se lamentó. Mónica también reveló que su presencia no era grata para todos en la cárcel: “Mucha gente lo tomó muy bien y muchas mujeres de otros presos lo tomaron muy mal, me amenazaron unas cuantas veces. Yo no lo pasé bien en ese momento porque si un preso me miraba, la mujer se enojaba. Las mujeres de los presos son muy posesivas”, rememoró. “Yo iba vestida como iban todas, tenés un reglamento para vestirte para la cárcel y sin embargo se quejaban de que yo iba en tacos y en calzas. Nunca entré de esa forma”, aseveró Mónica Farro.