Mientras cumple con el aislamiento obligatorio por coronavirus, Mónica Ayos charló con la revista Pronto a través de un live de Instagram. Contó que está atravesando la cuarentena con su pareja, Diego Olivera, y su hija, Victoria. Su hijo Federico vive a 10 minutos de su casa.
Al hablar del joven, Mónica reveló un fuerte momento que vivió hace dos meses: le leyó las cartas que le había dejado su expareja, papá de su hijo, antes de suicidarse.
"Se las leí, sí, finalmente se las leí. Se movió un poco el tema y al moverse, en una de las situaciones de familia... No se las di, son de él pero no se las di".
"Mirá, cuando me lo preguntaron la última vez no las había leído él. Ahora que me lo preguntás vos, tengo que decir la verdad: no pasó hace mucho, pasó hace dos meses atrás, un poquito antes de que empezara esta cuarentena", comenzó diciendo. Y siguio: "Se las leí, sí, finalmente se las leí. Se movió un poco el tema y al moverse, en una de las situaciones de familia... No se las di, son de él pero no se las di.
¿Por qué no se las dio? Principalmente, porque el joven no se las pidió. En este punto, recordó cómo fue el momento. "Se las leí y fue un momento difícil para los dos porque él reconoce muchísimas cosas en esas cartas. Fede era muy chico y hoy es un pedazo de actor... Esta bendita profesión le sirvió para canalizar un montón de cosas de él y es el pedazo de actor que es por la historia que tiene sobre su espalda... Fede pone toda su energía ahí", explicó.
"Se las leí y fue un momento difícil para los dos porque él reconoce muchísimas cosas en esas cartas".
Federico nació en un delicado momento; Mónica sufría violencia de género por parte de su expareja. Muchos años después, pudo hablar con él sobre este tema y otros que marcaron a ambos para siempre.