En el largo periplo que tuvo el cadáver de Eva Perón, que fue embalsamado, profanado y terminó regresando al país después de 24 años de su muerte, el peluquero de Susana Giménez, Miguel Romano, tiene un lugar dentro de la historia. En Incorrectas, contó cómo cumplió su sueño de peinar a la “abanderada de los pobres” aunque nunca pensó que iba a ser en esas circunstancias.
"Le hice un peinado todo para atrás, estaba rubia rubia y con dos tirabuzones a los costados. Estaba maquillada, perfecta. El último peinado de Evita se lo hice yo".
“Fue hace muchos años. Fue cuando estaban en el poder Lastiri, Isabel Perón y López Rega. Estaban todos los médicos, le habían puesto una bata blanca muy linda y la restauraron por última vez antes de llevarla al Cementerio de la Recoleta donde está ahora”, contó sobre el hecho que ocurrió en 1976, cuando el cadaver regresó al país.
“Lo más hermoso de esto es que cuando yo era chico, ella fue a mi colegio y me entregó un poncho. ‘Cuando sea grande yo la voy a peinar’, le dije y Eva se quedó mirándome”, confesó. “Pasó mucho tiempo, yo peinaba a Norma, la primera dama (N. de la R: Norma López Rega, esposa de Raúl Lastrini, presidente interino tras la renuncia de Héctor José Cámpora) y fui parte de la última vez que la arreglaron”, recordó. ¿Cómo arregló a Evita para su lecho final? “Le hice un peinado todo para atrás, estaba rubia rubia y con dos tirabuzones a los costados. Estaba maquillada, perfecta”, reveló el peluquero, que además peinó a otras figuras como Tita Merello, Marlene Dietrich o Sophia Loren. “El último peinado de Evita se lo hice yo", finalizó Miguel Romano.