Su objetivo era pedir a través de una famosa app empanadas: comer y relajarse en su casa en pleno aislamiento obligatorio por coronavirus. Sin embargo, Melina Fleiderman vivió una incómoda situación que no se esperaba y así lo contó vía Twitter.
"Quiero denunciar una situación que viví anoche y estoy segura que vas a poder ponerte en mi lugar. Además, quiero saber si les pasó. Como toda situación en la que una se siente acosada sirve, al compartirla, para desnaturalizarla", comenzó diciendo a través de la red. Y detalló en un hilo la incómoda secuencia que el chico de delivery le hizo vivir.
Así relató Melina el acoso que sufrió al pedir comida mediante una app:
"Por medio de la famosa aplicación de pedidos de comida a domicilio encargué empanadas. La comida llegó sin problemas. Después de las 23.30, un rato largo tras haber cenado, ya estaba acostada y sonó mi WhatsApp.
La notificación del mensaje era de un tal R (a quien no conocía ni tenía agendado). Me llamó la atención, particularmente por el horario -casi de medianoche- y porque su mensaje decía: 'Hola Melina...'. No respondí ya que, insisto, no conocía a la persona.
En resumidas cuentas y ahorrando detalles. El chico del delivery se agendó mi número, me llamó por mi nombre, me escribió de manera totalmente desubicada para decirme la impresión que le había causado físicamente y que por ese motivo quería comenzar una charla conmigo.
No solo me incomodó, sino que me pareció una situación insegura y de mucha vulnerabilidad. La persona, que por la aplicación tiene acceso a mi dirección, mi piso, mi nombre y mi celular, lo usó indiscriminadamente para levantarme.
Ya hice la denuncia a la plataforma y no obtuve respuesta. Lo que me parece grave también. Por omisión estan avalando que sujetos desubicados se manejen como quieren. Y me da bronca porque valoro mucho a quienes, con respeto, hacen este trabajo de altisimo riesgo. Nadie tiene derecho a valerse de tus datos para insinuarse. Es acoso y punto".