El vínculo entre Karina Jelinek (35) y Alberto Czernikowski (27) va más allá de una linda amistad, ya que además de ser novios, se pasean como una pareja de políticos en campaña. El fin de semana, la modelo y el director de juventud de la provincia de Buenos Aires visitaron un merendero de Malvinas Argentinas donde se alimentan a casi 80 menores, y Matilda Blanco fue lapidaria al analizar el outfit de Karina.
Sin medias tintas, la crítica de moda disparó desde Nosotros a la Mañana: "Se vistió de punga sexy (sic) para ir a Los Polvorines". Instantes después, Matilda continuó: "Se inventó un look entre punga y rollinga sexy".
"La gente no es tonta, se da cuenta de que esto es recontra forzado. (...) Una colita arriba, la remera atada, un jogging y unas zapatillas hechas bolsa. No me parece".
Ante la impugnación de algunos de sus compañeros, la asesora de imagen se explayó: "La gente no es tonta. Uno puede generar kinestesia con la gente, es decir, acercarse. Un político se arremanga las mangas de su camisa. Pero la gente no es tonta, se da cuenta de que esto es recontra forzado. (...) Una colita arriba, la remera atada, un jogging y unas zapatillas hechas bolsa. No me parece".
Al final, Matilda Blanco ponderó la tarea solidaria de Karina Jelinek y marcó la diferencia de vestuario con el funcionario bonaerense de Cambiemos, a quien consideró correctamente lookeado: "La actitud es buenísima. Pero voy a decir una cosa. La ropa, lo que te ponés, también es una manera de comunicar y dice de vos. Me parece que ella está comunicando algo que no es correcto. Si ella se pone un bucito, un jean, unas zapatillas, es lo mismo y es mucho más cercano. Porque sino, mostrar el cuerpo, no. Pantalón colorado, remera celeste, zapatillas viejas...".