El sarcasmo de referirse a la familia Montaner como una secta es algo que afecta de forma directa a Marlene Rodríguez, la esposa de Ricardo Montaner y madre de Ricky, Mau y Evaluna.
"A mí me duele un poco más. Y me imagino que me duele más porque soy como la mamá gallina (sic) que no quiero que digan nada de mis hijos. Sobre todo, cuando siento que no es justo", comenzó en una nota con Mañanísima (lunes a viernes a las 10 por Ciudad Magazine)
"Me puse a leer mientras esperaba que me vinieran a buscar y hubo dos comentarios muy feitos en la broma, y yo las bloqueé. Y las bloqueé porque no quiero tener gente tóxica en mi vida, ni en las redes ni en la vida. Una persona que es capaz de hacer un comentario bomba en mi ventanita la verdad es que no la quiero tener cerca", aclaro en su mano a mano con Pampito.
"A mí me afecta. Yo sé que los artistas de mis hijos están mucho más curados".
Al final, Marlene Montaner se diferenció de su esposo y de sus hijos: "A mí me afecta. Yo sé que los artistas de mis hijos están mucho más curados. Entones, yo me mantengo más retirada de eso porque me duele".
MARLENE MONTANER Y EL MITO DE LA FAMILIA PERFECTA
Además, Marlene Montaner se horrorizó al hablar sobre la fama de que la suya es una familia perfecta.
"Tenemos miles de diferencias. Me da gracia porque no hay nada distinto a nosotros a una familia tradicional, lo único que estamos más expuestos. Somos una familia que nos peleamos, por supuesto", arrancó.
"Me da gracia porque no hay nada distinto a nosotros a una familia tradicional, lo único que estamos más expuestos"
Luego, admitió: "Me horroriza cuando dicen que somos una familia perfecta. Me horroriza porque no hay nada más lejano a eso. Tenemos 500 motivos todos".
Por otra parte, reflexionó sobre la ironía de que son "una mafia rara" a cuento de que con la incorporación formal de Stefi Roitman a la familia, ahora "nadie entra ni nadie sale" del grupo de WhatsApp.
"Nosotros apostamos al amor para toda la vida. Puede pasar que se divorcie alguien. Pero no nos casamos pensando que si no funciona nos separamos. Que nadie entra es que no hay terceros, y que nadie sale porque aquí estamos y vamos a estar bien", cerró Marlene Montaner.