Para comprender la contundencia de la decepción de Marina Calabró con Jorge Rial, hay que retrotraerse a lo que le había dicho a Ciudad en febrero, cuando fue la primera convocada para lo que sería TV Nostra: "Me tienta la posibilidad de volver a trabajar con Jorge porque hice cuatro años de Intrusos y lo pasé genial con él, tenemos una relación de confianza, respeto y es uno de los pocos conductores con los que me tiro a la pileta a laburar sin pensarlo. Sé cómo es, cómo trabaja y lo admiro".
Sin embargo, el hecho de que Rial le haya comunicado dos horas antes de salir al aire el último viernes que había decidido de forma unilateral terminar con el programa, y dejarla sin trabajo junto a Ángela Lerena y Diego Ramos, la defraudó. “Lo vivo como una traición porque teníamos un diálogo diario. Esto es así y no lo puedo ocultar. Por eso hablo de problemas reales al tratar de puteada de tránsito lo que pasó con Pampita. Lo que pasó con Jorge fue una gran decepción, es una persona en la que confiaba laboralmente y me dio un cachetazo de esa magnitud…”, se sinceró Calabró este miércoles ante Ciudad.
“Con el levantamiento de última está en su derecho, pero no puede avisarme dos horas antes. No me lo merezco, ninguno de los tres panelistas nos lo merecíamos”, continuó.
"Con Jorge hay una relación laboral y personal. No de amistad, pero sí de conocimiento y confianza de muchos años. Estoy muy mortificada por lo personal, además de por lo laboral”.
“Pero yo me lo merecía menos, porque a Ángela y a Diego los conoció para este proyecto y conmigo hay una relación laboral y personal. No de amistad, pero sí de conocimiento y confianza de muchos años. Estoy muy mortificada por lo personal, además de por lo laboral”, concluyó Marina Calabró enfática, poniendo de manifiesto cuánto le duele todavía la actitud de Jorge Rial.