El aislamiento obligatorio, junto a la limpieza de las manos, es la herramienta más efectiva y económica para hacerle frente al coronavirus. Sin embargo, son los más chiquitos quienes sufren este rotundo cambio en sus hábitos (muchas veces sin comprender qué está pasando), y en Los Ángeles de la mañana María Julia Oliván contó cómo gracias a un didáctico video consiguió apoyar a su hijo Antonio (4) que tiene trastorno del espectro autista (TEA).
“Está en internet en YouTube. Se llama El Monstruo de los Colores Coronavirus. Cada emoción es un color. Hay momentos en los que él se pone a gritar y le digo ‘¿estás rojo-enojado o amarillo-confundido?’. ‘¿Por qué no estás verde-calmo?’”, reveló la periodista, sobre una adaptación animada del libro El Monstruo de Colores de la autora Anna Llenas quien a través de “una historia sencilla y divertida” introduce “a pequeños y a mayores en el fascinante lenguaje de las emociones”, afirma la escritora.
“Al Monstruo de los colores le pasó lo mismo que Antonio y a su terapeuta también”, contó María Julia, con tono cómplice con las “angelitas”, mientras tenía a upa a su nene. “El Monstruo estaba en la casa y nadie podía salir porque había una enfermedad que se llamaba coronavirus que hacía que los nenes se tengan que quedar en sus hogares”, comentó, entre risas, mientras su hijo la escuchaba.
"El Monstruo estaba en la casa y nadie podía salir porque había una enfermedad que se llamaba coronavirus que hacía que los nenes se tengan que quedar en sus hogares".
“Los colores fueron su primera obsesión. Así como los números, las formas, las letras o las partes del cuerpo. Pero el registro de las emociones no es solo para los chicos con autismo. Viste que a los chicos a veces vos les preguntás qué le pasan y no saben decirte”, destacó, sobre la importancia del material pedagógico.
"El registro de las emociones no es solo para los chicos con autismo. Viste que a los chicos a veces vos les preguntás qué te pasan y no saben decirte Cuando están enojados los niños expresan la depresión a través del enojo extremo".
La periodista dio detalles de cómo, más allá del diagnóstico del pequeño, puede ayudar el video a reconocer las emociones de todos los pequeños: “Cuando están enojados, eso me lo decía mi acompañante parental, los niños más grandes o los adolescentes expresan la depresión a través del enojo extremo. Cuando vos los ves muy enojados es que en realidad pueden estar deprimidos. Entonces, cuando yo no le quiero dar el ipad o ponerle la tele me dice ‘triste no llorar’. La primera vez que lo dijo me emocioné y lo festejé tomándome una botella de vino”, comentó, entre risas, sobre cómo su nene había podido manifestar sus sensaciones.