Como periodista, Marcelo Polino (53) tiene la costumbre de entrevistar a famosos o "pincharlos" para hacerlos reaccionar y que digan lo que de otra forma no habrían dicho. Pero la realidad es que no son muchas las veces en las que él es el indagado. Sin embargo, el domingo por la noche accedió gustoso a Debo decir, y se despachó con detalles de su pasado (y hasta ahora desconocido) romance con la hija de Pipo Pescador.
"Me fui a vivir a España porque estaba en pareja con la hija de Pipo Pescador".
Hijo único y oriundo de la localidad bonaerense de Tres Arroyos, el jurado de Bailando 2017 explicó: "Yo soñaba con venir a Buenos Aires a trabajar a la televisión. Pensaba que iba a ser feliz cuando trabajara en la tele. Pero no hay nada más lejano que ser feliz trabajando en la televisión, ja, ja. Pasa que cuando uno vive en un pueblo, ve a la gente bien vestida, a Mirtha Legrand con vestido, o que Gerardo Sofovich regalaba plata. Yo quería estar ahí, era el lugar de la felicidad".
Terminado el secundario, Polino contó que cumplió con su deseo de instalarse en capital en la casa de su padrino, de donde se tuvo que ir después de un año. "Empecé a rondar un poco por la ciudad, como toda la gente del interior que no tiene un mango. Iba viviendo donde podía, pasé noches frías, tuve que dormir en una plaza. Y lo digo con alegría porque yo sabía que lo iba a superar, porque yo venía a ser famoso".
"Viví en España y en París. Yo trabajaba de mago. Era más parecido al Mago sin dientes que a David Copperfield".
Ya de más adulto, el conductor de Polino auténtico (sábados de 10 a 14 por radio Mitre) se explayó sobre sus inicios en los medios y el romance que vivió con Carmela Fischer, la hija de Pipo Pescador. "Me fui a vivir a España porque estaba en pareja con la hija de Pipo Pescador. Cuando me vine a Argentina, no tenía trabajo y una amiga me ofreció que limpiara las oficinas de la revista Tal cual. Después de limpiar, me quedaba leyendo las revistas, hasta que un día un redactor me dijo de salir a hacer una nota un domingo. Obvio que fui. Eran dos gemelas separadas al nacer, que encontró Sofovich… Ahí empecé y nunca paré. De ahí pasé a radio Mitre, después a la tele con Lucho Avilés y nunca paré. Van a hacer 25 años que estoy todos los días en la tele".
Por otra parte, reveló cómo fueron sus días en el exterior: "Viví en España y en París. Yo trabajaba de mago. Era más parecido al Mago sin dientes que a David Copperfield", remató Marcelo Polino entre risas.