Con tan sólo treinta años, Luisana Lopilato tiene una historia de vida intensa: actriz infantil, ídola teen, esposa del exitoso cantante canadiense Michael Bublé (41) y orgullosa mamá de Noah (4) y Elías (1 año y medio). Entre todos esos títulos, Luisana no duda ante las cámaras de Ciudad: el rol que mejor la define, y el que más le gusta, es el de mamá. En ese sentido, Luisana se vuelve incondicional. Por eso, cuando el año pasado su hijito mayor debió afrontar un cáncer de hígado, ella no titubeó en dejar todo para estar a su lado.
Hoy, con Noah felizmente recuperado, la actriz se muestra más madura y retoma con fuerza su carrera de la mano de la película Los que aman, odian. El thriller que Lopilato protagoniza junto a Guillermo Francella bajo la dirección de Alejandro Maci llega a los cines el 7 de septiembre y muestra a Lopilato en un rol sumamente distinto a los que nos tiene acostumbrados.
"Soy una mamá canguro así que mi familia se viene conmigo cada vez que viajo para trabajar. Hacer una película me lleva cinco semanas y después soy madre full time".
"Mary es una femme fatale, que le gusta gustar y lo deja muy en claro. Es una mujer que viajó, estudió mucho y es muy segura e independiente. Y tiene este problemita: le gusta gustar", cuenta con entusiasmo Luisana sobre su nuevo desafío en el cine.
- ¿A vos también te gusta gustar?
- No sé si como le pasa a mi personaje pero sí es cierto que a todas las mujeres nos gusta estar bien. Me refiero a estar bien en lo que a uno le da seguridad: puede ser tener bien el pelo, las manos pintadas… es encontrar lo que a una te hace sentir segura.
- ¿Y alguna vez te sentiste una femme fatale como tu personaje?
- No, para nada. Cero. Estoy muy lejos de sentirme una femme fatale.
- ¿Qué te atrapó de la película para que decidieras venir al país a filmarla?
- Es una historia alucinante, que creo que va a gustar y no decepciona nunca al espectador. Te tiene atrapado hasta el final. Así como un pintor tiene muchas pinturas pero hizo una buena pintura que se destaca; bueno yo siento que esta es mi buena película. Siento que es mi película.
- ¿Cómo fue el reencuentro con Guillermo Francella, con quien hicieron Casados con hijos?
- Siempre es un placer trabajar con Guillermo. La verdad es que él es muy profesional y me gusta mucho reencontrarme con él en el set. ¡Y también fuera del set! Lo disfruto mucho porque es muy buena persona y aprendo un montón: lo escucho y me gusta saber siempre su opinión.
"De a poquito vamos limpiando el colecho. Pero para mí es lo más lindo, me encanta dormir con mis hijos, los amo y es disfrutar el momento".
- ¿Cómo te llevás con las escenas de pasión?
- En realidad, siempre sugiero… nunca mostré nada. Y a la hora de filmar en el set, es todo mucho más frío de lo que se ve en la pantalla. Hay mucha gente, se filma por partes y planos. Siempre que lo hice me sentí cómoda porque nunca mostré nada y todo lo que hago es muy cuidado. También es importante estar rodeada de buena gente y que haya respeto en el set.
- ¿A Michael no le dan celos estas escenas?
- No, para nada. Yo tampoco soy una persona celosa. Me gusta cuidar mi lugar pero cero celosa.
- ¿Cómo manejás tu trabajo y los viajes con tu dinámica familiar?
- Bueno, soy una mamá canguro así que mi familia se viene conmigo. En general se habla de ‘uy cuánto viaja o filma’. Pero la verdad es que son trabajos muy puntuales: hacer una película me lleva cinco semanas y yo después soy mamá full time. Entonces, tal vez hago una película y tengo seis meses de no hacer nada hasta que elijo otro proyecto, al que le dedico alrededor de cinco semanas. Pero mi mejor rol es el de madre.
- ¿Michael también viaja con vos cuando filmás?
- Sí, todos, viene la familia completa conmigo. Cuando él tiene gira, yo lo acompaño con los nenes y así vamos arreglando nuestras agendas. Al principio nos costaba más coordinar pero ahora ya nos resulta fácil.
- En el rol de mamá, ¿cómo sos con los límites?
- Me cuesta muuucho poner límites.
"Siempre que hice una escena apasionada me sentí cómoda porque nunca mostré nada y todo lo que hago es muy cuidado".
- ¿Y cómo manejás los berrinches de Noah y Elias?
- Ay, no puedo, me cuesta el tema de los límites, es muy difícil para mí. No me gusta escuchar llorar a ningún niño. A veces estoy en un restaurante, escucho llorar a un nene y me dan ganas de ir y decirle a la mamá ‘¿me dejás tenerlo un poquito a upa que yo te lo hamaco?’ (risas). Me ha pasado muchas veces de levantarme de mi mesa e invitarlos a jugar, todo para que no lloren.
- ¿Siguen haciendo colecho, como alguna vez contaste?
- Y… de a poquito vamos limpiando el colecho (risas). Pero para mí es lo más lindo, me encanta dormir con mis hijos, los amo y es disfrutar el momento. Cuando tengan 10 años no van a querer dormir más conmigo así que ahora sí aprovecho y les digo ‘vengan que los abrazo’ (risas).
- ¿Te gustaría tener otro hijo?
- Sí, me encantaría.
- ¿Se viene el año que viene?
- No sé, nunca planeé a mis hijos así que llegan cuando llegan.
- ¿Cuántos te gustaría tener?
- ¡Me encantaría tener veinte hijos! Me encanta la familia grande pero el cuerpo no te da… sobre todo cuando pasaste por cesáreas. No sé, me encantaría tener los que el cuerpo me de.
- ¿Te gustaría protagonizar una película infantil para poder llevar a los nenes y que te vean?
- No lo había pensado pero sí, podría llegar a ser, ¿por qué no?
- ¿Ellos saben a qué se dedican sus papás tan famosos?
- Sí, saben. Además, mi mamá les pone videos en Youtube de cuando yo trabajaba en Chiquititas y les dice ‘esta es su mamá cuando era nena’. Ellos no lo pueden creer. A veces vienen cantantes amigos nuestros a casa y les piden que canten sus canciones, como un juego. También me dicen que vivo adentro de la televisión. Me estoy por ir y me preguntan ‘¿te vas adentro de la televisión mamá?’.
Videos y edición: Leandro Bevilacqua.