En Fantino a la tarde (América) informaron sobre el caso que tiene como protagonista a Joaquín Duhalde Bisi (19) que manejaba ebrio al volante de un Audi A4 color gris. En una maniobra a alta velocidad, chocó contra una columna metálica sobre camino de Los Remeros y avenida Santa María de Rincón de Milberg, en Tigre. Dos de los tres adolescentes que iban con él en el auto murieron en el acto y solo un joven sobrevivió. Él salió del choque con lesiones mínimas y marcó un resultado de 1,38 en su examen de alcoholemia. Sí, el triple de lo permitido.
En este contexto, Luis Ventura recordó cuando uno de sus hijos -Nahuel o Facundo, ya que el más chico tiene 7 años- le sacó la camioneta sin que él supiera y sufrió una accidente de tránsito. "Lo tenés que vivir. Fue destrucción total... Una camioneta sacada hacía un mes. Dejé colgada las llaves en un llavero, había alguien que en mi casa había recibido el registro de conducir hacía menos de una semana y se consideró con facultades y con capacidades para poder manejar a la madrugada y bueno...”, contó.
Entonces, aclaró que su hijo no le robó el auto y rememoró la tremenda llamada que recibió tras el accidente. "Robar no. Cuando es un hijo el que te lo saca, no te lo roba. Me sacó las llaves y ya con el registro logrado, salió. Me llamaron a la madrugada y fue la peor noticia que pude recibir. Agradezco al cielo que se haya salvado la vida. Porque si ustedes hubieran visto cómo quedó la camioneta... Destrucción total: desapareció la trompa, la cabeza del conductor incrustada y marcada la semiesfera en el parabrisas”, continuó.
Antes de cerrar, Luis admitió que se sintió "responsable" de lo que había ocurrido.