El nombre de Agustín Longueira, quien se hizo conocido como el guardaespaldas de Wanda Nara, volvió a tomar fuerza cuando apareció una versión de que él habría tenido un encuentro con la mediática cuando estuvo en nuestro país. Las tibias desmentidas del custodio no hicieron más que acrecentar el rumor y ahora volvió a echar más leña al fuego.
“Fui como invitado a esa fiesta, no fui a trabajar”, comentó, sobre una fiesta privada que tuvo la esposa de Mauro Icardi, entrevistado en A la tarde. Pero Agustín terminó tentándose de risa, cuando indagaron en que habría pasado varias noches en la casa que Wanda tiene en un barrio privado.
“¿Es cómodo el sillón de la casa de Santa Bárbara?”, lanzó Diego Esteves, haciendo que el custodio comience a reírse y se tape la cara. “¡¿Vos querés que yo te crea algo?! ¡Si te tapás la cara y te reís!”, lo retó Débora D’Amato. “Es que tengo vergüenza”, se excusó él. “¡Qué vas a tener vergüenza si vos fumás abajo del agua!”, le recriminó su actitud.
"Me hubiera encantado, pero es una mujer casada. Yo la respeto y no hice nada".
¿WANDA NARA TUVO UN AFFAIRE CON SU GUARDAESPALDAS?
“Las malas lenguas, o las buenas, dicen que Agustín pasó 72 horas conviviendo con Wanda, hasta donde sé, en el sillón. No sé si en algún momento abandonó el sillón y se trasladó a algún otro ambiente más cómodo de la casa”, comentó el periodista.
Sin embargo, el granadero intentó dar una respuesta más sólida. “Me hubiera encantado, pero es una mujer casada. Yo la respeto y no hice nada”, aseveró.
“¿Es verdad que Mauro tuvo un ataque de celos y ahí se terminó tu labor?”, continuó el panelista. “Sí, se terminó el mismo día que llegó”, concluyó. ¡Uhhh!