No es un buen momento personal para Lizy Tagliani. Luego de que se conociera la noticia sobre la detención de su novio, Federico de Nichilo, en un confuso episodio donde lo encontraron con pertenencias de la actriz y más de 30 mil pesos, la capocómica se refirió en detalle al tema.
"Siento la necesidad de explicar, aunque estoy pasando un momento anímico muy feo. Estoy agotada porque no sé qué más decir. Obviamente (cuando pasó esto) tuve una manera de pensar y después tuve otra, porque eran dos situaciones distintas", comenzó diciendo en Intrusos.
"Lo que más me dolió de todo esto fue la falta de confianza, la desilución y no saber qué responder. No necesité sus explicaciones porque le creo, porque cuando llegué a la comisaría me di cuenta de que no me mintió", continuó.
"Nosotros hablamos a las 9 de la mañana y 11 y pico recibo un llamado de WhatsApp de él, atiendo, no me contesta y lo vuelvo a llamar yo. Ahí me dice, 'me mandé una macana, me monté (se vistió de mujer)'".
Luego, se refirió al momento en el que su novio quedó detenido: "El robo existió, pero no es robo cuando es una pareja. Me mintió porque no estaba en el lugar dónde me dijo que estaba y las dos personas con las que estaba las había conocido ese día. Nosotros hablamos a las 9 de la mañana y 11 y pico recibo un llamado de WhatsApp de él, atiendo, no me contesta y lo vuelvo a llamar yo. Ahí me dice, 'me mandé una macana, me monté (se vistió de mujer)'". Y agregó: "Después hablo con un policía y me dice que no me puede dar mucha información, pero que Nicolás está con dos personas, que está vestido de mujer y nos cuenta que se separó de usted. Y que lo sospechoso era que tenía una caja fuerte, mucho dinero y muchas valijas con cosas. Ahí sí pensé que me robó y que había aprovechado que yo no estaba para irse".
En ese momento, Lizy aseguró haber pensado lo peor: "Tuve que hacer dos funciones y me fui a la comisaría. Llego (me había preparado todo porque había mucha gente y prensa) y lo único que tenía que hacer era reconocer mis cosas. Mi trámite se terminaba ahí. Me permiten verlo y me empezó a pedir perdón muchas veces y a decirme que no era él en ese momento. Es como que cuando empieza a sentir que le dan ganas y empieza a pintarse y transformarse, es otra persona, se transforma. Después, tiene momentos de lucidez".
"Juro por mi vieja que cuando abrí la primer valija me di cuenta que no era robo. Osea, obviamente es un robo porque se lo llevó y no le avisó a nadie, ni me avisó a mí pero sabía que era un robo".
En cuanto a su reacción al verlo en la celda, contó: "Le dije que no quería ninguna explicación y que, como su familia estaba lejos, lo iba a ayudar. Me daban ganas de decirle de todo, pero a la vez no podía seguir tirándole piñas a una persona que estaba tan deshecha, sola".
Por último, Lizy Tagliani dejó en claro que cree en la palabra de Nicolás: "Juro por mi vieja que cuando abrí la primer valija me di cuenta de que no era robo. O sea, obviamente es un robo porque se lo llevó y no le avisó a nadie ni me avisó a mí, pero sabía que era un robo. No era una persona que estuvo un año esperando este momento para robarme. En la valija había un poncho viejo, vestidos viejos y nuevos, zapatos que estoy casi segura que no tenían el par, estuches de anteojos vacios y abiertos, unas botellas de alcohol y mis perfumes. No había nada él".