Este domingo, tras dos años en el extranjero, Luisana Lopilato regresó a la Argentina junto a Michael Bublé y los hijos de la pareja: Noah, Elías y Vida. La actriz y su marido se mostraron muy simpáticos ante la cámara de Ciudad, que los encontró junto a su familia a la salida del Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, en Ezeiza.
Lejos de los looks glamorosos con los que se los suele ver en las redes sociales, Luisana y Michael llegaron al país vistiendo jeans, calzas, remeras y buzos. La actriz y el cantante recurrieron solo a un gorros y anteojos para ocultar su rostro, en tanto que los pequeños llegaron a cara descubierta, salvo por los barbijos de rigor para evitar la propagación del covid.
Luisana llegó a la Argentina con el objeto de ver a su familia, pero también para filmar la película Pipa, en la que continuará las andanzas de la policía que interpretó en Perdida y La Corazonada. El film, el primero que producirá íntegramente Netflix en la Argentina, está basado también en una novela de Florencia Etcheves y se rodará durante dos meses y medio en Salta y Jujuy.