Luego de que en LAM filtraran que Karina La Princesita habría tenido un fuerte enojo con la producción de ¿Quién es la Máscara?, la investigadora habló de cómo vive su rol en el programa de Telefe y fue tajante con su postura.
“(Lo de la discusión) son cosas que pasan en el programa, pero por ahora no hay mala onda. Llega a haber mala onda, ustedes saben que agarro mis cosas y me voy a la mier… porque yo hago tele para divertirme”, lanzó la cantante, sin filtro, en una nota que dio para el ciclo que conduce Ángel de Brito por América.
“Lo que pasa es que hay mucha mala onda con respecto al programa, vamos a ser sinceros. Cuando querés guardar un secreto tenés a todos los que te lo spoilean. Una cosa es jugar y tirar el nombre de un personaje y otra cosa es spoilearlo”, agregó, firme.
"Llega a haber mala onda, ustedes saben que agarro mis cosas y me voy a la mier… porque yo hago tele para divertirme".
Y cerró, sin vueltas: “Igual, a mí no me interesa si lo spoilean. Es normal cuando sale un programa que tiren mala onda y la realidad es que esto es algo distinto, algo para llevar diversión y tal vez, en este país, si no hay algo picante no estamos acostumbrados".
PICANTES COMENTARIOS DE KARINA LA PRINCESITA Y WANDA NARA SOBRE LOS “CUERNOS” EN ¿QUIÉN ES LA MÁSCARA?
Además de escuchar atentamente a los famosos que cantan en ¿Quién es la Máscara? y se esconden debajo de distintos disfraces antes de develar su identidad, Karina La Princesita y Wanda Nara le ponen su característico humor al programa.
Y esta no fue la excepción. En esta oportunidad, luego de que Brillo, un concursante que se presentó con un traje de unicornio sorprendiera a Karina al entonar uno de sus grandes éxitos, le quiso dar un regalo y le pidió que le tocara su cuernito.
Sin embargo, La Princesita lanzó, divertida: “Pasa que ya estoy cansada de cuernitos, pero bueno. ¡Uno más no me hace nada! Gracias, al fin. ¡Me quitó la maldición de los cuernos!”, expresó, entre risas. Y Wanda Nara le siguió el ida y vuelta con mucha picardía: “¡Ay, pará! Liberanos a todas, entonces. ¡Nunca se sabe, liberen a todas!”.