La infancia de Karina Gao en Buenos Aires, llegada al país en 1993 desde el sur de China con apenas ocho años, fue por demás complicada debido a la discriminación de la que fue objeto. Migrante de origen humilde, la cocinera de Flor de Equipo contó en PH cómo fue que afrontó el bullying que le hicieron tanto en la primaria como en la secundaria.
“No tenía amiguitos, esa parte me costó un poco más, porque como en esa época no había muchos chinos los chicos eran mucho más crueles. Tanto en la primaria como en la secundaria fue heavy”, aseguró respecto a su integración.
En cuanto a la escuela, Karina contó: “Las maestras siempre me integraban, pero los chicos no. Me acuerdo que una vez me encerraron en el baño de las chicas y me tiraron agua desde arriba. El bullying es complicado, sobre todo con los que ayudan”.
"Mis compañeros me llamaban los sábados a la noche borrachos a mi casa cag… de risa, que atendía mi papá, yo me sentía mal, veía cómo mi papá sufría por mí, y yo sufría Una situación horrible”.
Luego, fue crítica por su paso por el colegio Nacional Buenos Aires: “Ahí sufrí un montón de bullying, y es un colegio que no te acompaña psicológicamente porque quieren que seas grande. Para nosotros, los chinos, es muy difícil denunciar algo, pero yo me animé a denunciar que mis compañeros me llamaban los sábados a la noche borrachos a mi casa cag… de risa, que atendía mi papá, yo me sentía mal, veía cómo mi papá sufría por mí, y yo sufría Una situación horrible”.
“Y cuando le conté a la psicopedagoga que me discriminaban me decepcionó un montón, me encerré en mi mundo, porque solo entró al aula a decir que había alumnos que discriminaban y que eso no estaba bien”, concluyó Karina Gao con dolor.