Desde que los perritos Morita y Caramelo llegaron a la casa de Gran Hermano, los participantes pergeñaron una serie de reglas para evitar que los cachorros hagan de las suyas en las habitaciones, y esta vez Julieta pagó un precio muy caro.
La modelo y bailarina, que le da una importancia extrema al cuidado de su aspecto, utiliza sus maquillajes con asiduidad y no hubo una gala de nominaciones o eliminaciones que no haya sorprendido a los televidentes con sus llamativos looks.
Sin embargo, en las últimas horas, Julieta se enfureció cuando Romina le mostró en la cocina una base totalmente destruida por las travesuras de los cachorritos, mientras preguntaba “¿De quién es esto?”.
LA REACCIÓN DE JULIETA AL DESCUBRIR QUE MORITA Y CARAMELO DESTRUYERON SU MAQUILLAJE
"¡No! Los voy a matar a estos perritos", exclamó Julieta con cara de fastidio. "Dejaron la puerta abierta de nuevo, Ju...", llegó a decirle Romina, intentando explicarle que los cachorritos no eran responsables de lo ocurrido, pero sus palabras no llegaron a sus oídos.
"Me comieron todo, Romi. ¡No lo tenía así! La c... de la lora. No me va a alcanzar para nada esto", explotó “Disney”. "Dejaron la puerta abierta del cuarto y los perros no saben, Ju", insistió Romina, pero todo intento de calmarla fue en vano.
"Tranquila, Juli. Si te va alcanzar, no falta nada... Guardalo para la gala", le dijo Romina mientras Julieta salía disparada hacia la habitación y, en su apuro, pisó a un perrito, que lloró de dolor y salió disparado de la habitación.
"Perdón, mi amor. Perdón, no te vi", dijo Julieta, tratando de acariciar al perrito, pero este se alejó al trote. "Ya está. No tienen la culpa ellos. Yo les vengo diciendo 'dejen las puertas cerradas' y la dejan abiertas", insistió Romina, sobre las precauciones que instauró.