Además de hablar de los temas más relevantes de la actualidad y mantener profundos intercambios con distintas personalidades de la televisión, Pampita también indaga sobre los aspectos más íntimos de sus invitados, que tocan de cerca su vida personal. Así fue el caso de la conductora de Pampita Online con Julián Weich.
Una pregunta de la modelo logró que el conductor abriera su corazón. Sin embargo, consciente de la historia de Carolina Ardohain (quien perdió a su hija Blanca en 2012), Weich confesó sus sensaciones al hablar de sus papás que ya no están y la presentadora dijo lo suyo.
Así fue el ida y vuelta de Pampita con Julián Weich:
Pampita: "¿Hay alguna perdida en tu vida que extrañás, que necesitás?".
Pampita: -¿Hay alguna perdida en tu vida que extrañás, que necesitás?
Weich: -No. Mi mamá falleció y mi papá falleció, pero yo hablo con ellos todos los días y estoy en contacto con ellos. Es difícil entenderlo, pero está en uno conectarse y comunicarse.
P: -¿Desde el pensamiento o lo verbalizás?
W: -Desde el pensamiento. Es un diálogo interno que, generalmente y en mí, provoca alegría. No provoca nostalgia ni tristeza. Nada… me cuesta hablar de estos temas adelante tuyo, Caro. Porque no es lo mismo hablar con cualquier persona que con vos. Así que no sé… es como que no quiero hablar.
Weich: "Mi mamá falleció y mi papá falleció. Nada… me cuesta hablar de estos temas adelante tuyo, Caro. Porque no es lo mismo hablar con cualquier persona que con vos. Así que no sé… es como que no quiero hablar".
P: -No, pero cada uno transita sus pérdidas de la manera que le parece y su proceso personal también. En ese sentido, no hay fórmulas ni hay que juzgar cómo lo vive el otro tampoco.
W: -Me da vergüenza hablar adelante tuyo, Caro. Disculpame.
P: -¡No, por favor! Con total libertad.
W: -Hay gente que necesita ir al cementerio, gente que necesita rezar, pensar o que necesita ver una foto. Hay muchas maneras de tener ese diálogo. Y el tema es no tener miedo y buscarlo porque es un dialogo sanador al 100 por ciento, haya o no haya respuesta. El diálogo en sí ya es sanador.