Desde antes de su ingreso a la casa de Gran Hermano 2016 se sabía que la participación de Ivana Icardi iba a traer cola. "La miramos comiendo pochoclos frente a la tele", afirmó Wanda Nara con ironía sobre la entrada al reality de su cuñada, dejando en claro que no le hizo mucho gracia a la familia. Ahora, la joven de 20 años dijo lo propio.
"Yo lo llamé y le dije a Mauro que entraba a Gran Hermano. Al principio me dijo ‘bueno’, se lo tomó hasta en joda porque hablamos por videollamada. Después, cambió y se enojó. Yo sé por qué se enojó".
Mientras se ejercitaba, la estudiante de Diseño de moda contó cómo fue el momento en el que le dijo a su hermano Mauro Icardi que iba a entrar al programa: "Yo lo llamé y le dije. Al principio me dijo ‘bueno’, se lo tomó hasta en joda porque hablamos por videollamada. Después, cambió y se enojó. Yo sé por qué se enojó", aseguró. ¿Teléfono para Wanda?
Además, Ivana afirmó se mostró preocupada por lo que pueda decirse fuera del programa: "No vine acá para estar haciendo drama, ni hablando de esas pelotudeces, no me interesa. Vine a ser Ivana Icardi. Mi hermano me quiere y yo también lo quiero. No me va a pegar un tiro. Igual es difícil mi situación porque todo lo que diga… La gente está ahí para matarte. O sea, ni un pedo me voy a tirar porque me van a decir ‘pedorra’", afirmó sobre la interna familiar.