Los ida y vuelta con humor de Carina Zampini ya son un clásico, empezando por sus guiños cómplices con Christian Petersen. Pero en este caso fue Mauricio Asta quien se llevó la atención e indignación de la conductora de El Gran Premio de la Cocina, a cuento de un comentario cariñoso.
Todo surgió con la devolución del cheff al plato de ñoquis que preparó Damián, uno de los participantes del reality culinario: “Me parece que apelaste a muchos ingredientes, me parece que no hacía falta el picante. Tampoco creo que haga falta terminar todo plato colocando aceite o pimienta en el último momento. Es un defecto de ver cocineros en televisión, que a todo le ponen un toque. Le ponen el chorrito de aceite para cancherear. Nada más”.
“Yo a veces me preocupo por Mauricio. Sé que tiene onda y todo, pero él es así de verdad, fuera de cámara. O peor. Acá se cuida un poquito por el horario de protección al menor”.
Con Felicitas Pizarro, presidenta del jurado presente, Carina le preguntó si era cierto lo que afirmaba Asta y la cocinera admitió entre risas: “Es verdad”. Tras un alarido de Mauricio para festejar su acierto, Zampini se sinceró: “Yo a veces me preocupo por Mauricio. Sé que tiene onda y todo, pero él es así de verdad, fuera de cámara. O peor. Acá se cuida un poquito por el horario de protección al menor”.
Entonces, Mauricio reflexionó: “Me encanta tenerte como mamá, porque...”. Antes de que Asta pudiera completar su idea, Carina explotó: “¡¿Cómo mamá?! Ah, es un hijo de… ¡No! Pará...”. En ese momento, Juan Marconi se acercó al estrado para exigirle a Asta que se disculpe con Zampini, y el jurado expresó: “Ella tiene un aura muy maternal, nos súper cuida, nos pone el freno”.
De todas formas, Mauricio Asta remató aclarando que a Marconi también lo quiere, pero no como a un padre porque puede llegar a ser un hijo suyo, por lo que Carina Zampini sentenció impostando el latiguillo de un antiguo personaje de telenovela: “Imbécil”.