El flechazo entre Abel Pintos (37) y Mora Calabrese (33) sucedió cuando ella lo fue a ver en primera fila a un recital en Chaco, en 2013. Esa noche, la emprendedora textil le pidió al representante del artista poder conocerlo, y así fue como Mora pudo expresarle todo su cariño y admiración a Abel en el camarín.
La química de ese primer cara a cara fue tal que ambos hicieron lo imposible para volver a verse, pese a la complejidad de sus agendas. Es que la chaqueña además es madre de Guillermina (13) fruto de una relación anterior, y por ese tiempo era apenas una niña.
Cultor del perfil bajo, foco de rumores de romances, el bahiense había reflexionado sobre su vida sentimental casi en simultáneo que conocía a Mora, la fan que se adueñó de su corazón: "Vivo mis experiencias y tengo mis historias, pero siempre cuidé mucho mi intimidad. Tengo una edad en la que elijo vivir todas las historias que se me presenten, pero contarlas le quita valor. El día que viva una historia de amor no lo voy a confesar a los cuatro vientos".
Así fue que, Abel y Mora mantuvieron su noviazgo a distancia geográfica y de los flashes, y se mantuvieron en el más estricto secreto hasta finales de 2019. Lo que motivó que durante esos años el genial artista fuera foco de innumerables rumores de romance.
El primer gesto público de amor de Pintos a Calabrese sucedió a mediados de 2017, luego de conquistar su tercer premio Gardel de Oro a la música, cuando le dedicó el galardón a su "Leona". Dos años más tarde, la portada de una revista publicaría una romántica selfie de la pareja y Abel blanqueó a través de Stories que estaba de novio.
Sin embargo, eso no modificó el sigilo con el que llevaban sus vidas, ya que continuó el completo hermetismo. Por eso mismo, apenas se reveló su identidad, Mora puso sus redes sociales en privado.
De todas formas, a cuenta gotas Abel dejó al descubierto el funcionamiento de la familia ensamblada que armó junto a Mora y Guille, su hija adolescente: "Cuando con Mora decidimos iniciar un camino de pareja, casi de inmediato le propusimos a Guillermina comenzar un camino de familia. Ella aceptó y yo entendí que debía pararme en otro lugar en la vida".
Así fue que en 2020 levantó un poco su perfil y bromeó nada menos que en el Día de los Enamorados: "Estás enamorado porque bailás en todos los rincones, los abrazos y las caricias son el pan de cada día y las risas y sonrisas te hacen la cara tres talles más grande. ¡Salud por eso! ¡Feliz día!".
Poco después, Abel y Mora anunciarían en Instagram la llegada de Agustín (11) meses, su primer hijo: "No nos cabe la felicidad en el cuerpo y las palabras no alcanzan para expresarla en su totalidad. Todo lo que pensamos nos resulta poco porque es demasiada grande la emoción".
Romántico incurable, en el Día de los Enamorados de 2021, el músico se arrodilló en medio de un campo para pedirle casamiento a la mujer de su vida, y ella aceptó halagada entre lágrimas.
Con la idea de preservarse, antes del nacimiento del bebé Abel y Mora se mudaron a Chaco: "Vivíamos en Pilar y estábamos lejos de las dos familias, no teníamos a nadie", justificó el músico.
Historia de amor que se coronó en cuotas, cuando se casaron por civil en Resistencia; días después tuvieron la ceremonia religiosa en Cañuelas oficiada por un sacerdote amigo del artista, y el sábado 25 de septiembre de 2021, que Abel Pintos y Mora Calabrese hicieron su gran fiesta de boda.