El domingo por la noche, Lizy Tagliani (49) presentó oficialmente en televisión a su novio rugbier, Leo Alturria (31), y nada más y nada menos que en el living de Susana Giménez. Toda la escena fue romántica y quedó coronada con un súper beso ante las cámaras. Sin embargo, apenas 48 horas más tarde, la relación quedó trunca.
Varios usuarios de las redes sociales apuntaron contra Alturria, a quien acusaron de "buscafama" y criticaron su pasado mediático. El joven -que trabaja como encargado de edificio- participó de muchos programas de televisión como La tribuna de Guido, El show del problema, Minuto para ganar, Ojos que no ven y hasta El precio justo, el ciclo que Lizy conduce en Telefe donde se conocieron.
Ante la repercusión negativa del romance, Lizy no pudo evitar quebrarse en el pase de Morfi con su ciclo. “Es horrible que se digan estas cosas. La gente no solo está conmigo porque soy famosa…”, comenzó, muy angustiada. “Le dije a Leo que no quería seguir con esta situación. Él no tiene que estar soportando todas las cosas que se dicen, ni yo me lo merezco. Le dije: ‘Seamos amigos, hablemos, tratemos de mantener lo mejor posible esta relación, pero no demos a entender más cosas porque me hace mal, no quiero, me hace sufrir’”, completó visiblemente dolida la conductora de Telefe, que contó en el ciclo de Susana que estaba al tanto de las pasadas participaciones televisivas del joven.
"Vamos a seguir manteniendo una distancia siendo amigos hasta que se acomode esto (por las críticas que recibió) y que no terminemos afectados nosotros dos".
Horas más tarde, Alturria habló telefónicamente con Intrusos, programa al que estaba anunciado como invitado al estudio originalmente. “Mil disculpas por no haber podido asistir. Vine a hablar con Lizy porque la vi bastante mal en el traspaso de su programa en Telefe. Me explicó lo que sentía, que me quería proteger y cuidar de las cosas que se dijeron. Ella me dijo que no me quiso exponer y le dije que me había cuidado y que no me había sentido expuesto”, comenzó.
“Creo que vamos a seguir manteniendo una distancia siendo amigos hasta que se acomode esto y que no terminemos afectados nosotros dos. A ella lo que le molestó es que me vean como un trepador. Yo lo que hago lo hago por hobby, me gusta participar de los programas. Ella me conoció ahí, en el medio. No es que (estoy con ella porque) me gusta la cámara y quiero fama. No lo veo tan así”, continuó.
“Yo la aprecio un montón, me encanta y la pasamos muy bien. Nos estábamos conociendo, yo soy una personas de ir muy despacio, no me molestó que me mostrara porque estoy orgulloso de que ella siente de que puede amar a alguien. Por eso salí con ella a mostrarme porque la veía feliz”, dijo Alturria.
"Las repercusiones la afectaron a Lizy, obvio que ella no es un medio para hacerme famoso. Primero hay un sentimiento, la conocí en persona y me encantó. Que el resto hable lo que quiera".
Cuando Damián Rojo reparó en que había dicho que Lizy lo amaba, pero él la apreciaba, Alturria respondió: “Yo no soy muy demostrativo, lo que pasa entre cuatro paredes se lo digo a ella y queda ahí”.
Luego, se refirió a un comentario que su madre había publicado en Instagram: “Suerte, hijo querido. Has logrado lo que yo soñé para mí: estar en la tele. Los quiero. Ellos sabrán qué habrán acordado. Tal vez Lizy ya sabe por qué lo hace”, escribió la mujer.
“Hablé con mi mamá y le pregunté qué había escrito, porque no había leído el comentario. Ella me dijo que estaba orgullosa porque siempre soñó con tener hijos artistas. Eso que puso de un arreglo se interpretó mal, como que era una mentira (lo nuestro). Las repercusiones la afectaron a Lizy, obvio que ella no es un medio para hacerme famoso. Primero hay un sentimiento antes, la conocí en persona y me encantó. Que el resto hable lo que quiera”, concluyó Alturria.