La viralización de un video en el que se ve a Diego Maradona bailando en un deplorable estado, movilizó a sus allegados a hablar sobre el 'entorno' del exfutbolista, que lo mantendría aislado de su familia.
Este jueves, Gianinna Maradona salió a dar su testimonio sobre la salud de su padre, y contó que buscará una vía judicial para poner a resguardo la vida del técnico.
"Estoy en el límite en el que no quiero exponer a mi papá, porque si lo tengo que hacer lo voy a hacer ante un juez. Y estoy averiguando de qué manera se puede hacer algo judicialmente, que antes se pueda firmar algo para que si hay algún tema en el que se quieran llegar a resguardar económicamente... Es todo de (Matías) Morla si así lo quiere él. Yo lo que quiero es que mi papá siga viviendo", aseguró la joven vía telefónico con Intrusos.
"Estoy en el límite en el que no quiero exponer a mi papá, porque si lo tengo que hacer lo voy a hacer ante un juez", aseguró Gianinna.
Contundente en sus declaraciones, Gianinna contó que ya no logra entablar una charla clara con su padre, incluso cuando 'se lo permiten'. "Yo el domingo no pude hablar con mi papá y no porque no haya querido sino porque no se podía hablar con él. Me ha pasado un montón de veces fingir en una conversación como si yo estuviera entendiendo (lo que dice), y resulta que no. (...) Y el domingo me pasaron un mensaje que yo sabía que no era de mi papá. ¿No puede hablar pero sí escribir?", agregó. Y se anticipó a las críticas (¿en clara elevación hacia su media hermana Jana?) asegurando que ni ella ni su familia dijeron alguna vez que "estaba secuestrado".
"Yo fui hasta la puerta del barrio pero, al igual que en el nuestro, no te dejan entrar. Fui a llevarle un remedio y me dijeron que lo dejara ahí. El día de su cumpleaños agarré pastillas y me las traje a mi casa para analizar qué eran. Esto no es de ahora, viene de hace un montón. Lo que pasa es que siempre lo negaron", cerró Gianinna.