¿Vieron esas familias que solo parecen existir en publicidades? Pues bien, ¡también las hay en la vida real! O no tan real, si nos atenemos a los beneficios que connota el modus vivendi de los stars.
Este es el caso de Bradley Cooper que, en un salto intempestivo de la pantalla gigante, al tiempo que las grandes productoras lo tienen en sus ligas de favoritos, el hombre se hace su merecido espacio para disfrutar de las mieles de la paternidad.
Así se los vio en plena caminata con la -diosa mundial- Irina Shayk, su bebé Lea De Seine y el perro de la familia.
Brad, camuflado como un papá full time, llevaba a la pequeña en la mochila porta infant, con Lea mirando hacia la calle. ¿Su look? Un básico que no defrauda cuando aparece el calorcito: pantalones bermudas grises, remera azul y ¡claro! lentes de sol.
Las miradas, entonces, se las llevó todas la criatura, con un simpático sombrero blanco y polainas multicolor. Irina, en tanto, mostró su recobrada figura con botitas, minishort, una camisa atada a la cintura y ¡súper sexy como siempre!
Casi casi, como una familia común y corriente…
¿El motivo del paseo? Hacer un pequeño tour de compras por Underwood Family Farms, para preparar la casa a tono del inminente festejo de Halloween, un verdadero clásico en el país del norte.
Foto Grosby Group