Una de las sorpresas que tuvo MasterChef Celebrity fue el exbasquetbolista Hernán “El Loco” Montenegro, quien demostró en el programa todo su talento para la cocina. Sin embargo, la experiencia de alta exigencia hizo que termine con ataques de pánico.
"Es un programa hermoso, al cual voy a estar siempre agradecido, pero uno de los días que grabamos empecé a sudar, me empezaron a temblar las manos, no podía cortar ni terminar el plato. Tuvieron que venir los paramédicos. Me empecé a sentir muy raro. Estaba teniendo un ataque de pánico”, reveló, en la mesa de Juana Viale.
"Pasaron dos semanas más y me sucedió otra vez. Yo estaba cocinando con Dolli Irigoyen, que es una genia como persona y como todo, y tenía que sacar un huevo frito para un plato asiático que tenía que terminar y comencé a temblar. Ella se dio cuenta y me dijo ‘correte porque te vas a quemar con el aceite’. Ella lo puso arriba del plato y lo terminó. Por eso digo que ella fue una maravilla de persona. Ahí pedí ayuda y estoy en tratamiento”, reconoció.
"Es un programa hermoso, al cual voy a estar siempre agradecido, pero uno de los días que grabamos empecé a sudar, me empezaron a temblar las manos, no podía cortar ni terminar el plato".
Juana Viale expresó su asombro con que el exdeportista, que llegó a jugar en la NBA termine así su experiencia en el reality, “Todo se despertó por el programa. Yo he jugado delante de 30 mil personas, pero nunca imaginé que me iba a pasar. El hecho de estar haciendo un metié que no es el tuyo, con mucha presión, muchas horas de grabación, la exposición pública”, aseguró.
"Yo he visto gente llorar, patear autos, putearse por el programa. Lo que pasa es que vos ves el editado y somos todos divinos".
“Yo he visto gente llorar, patear autos, putearse por el programa. Lo que pasa es que vos ves el editado y somos todos divinos”, reveló, para mostrarse terminante sobre la posibilidad de regresar a este tipo de formatos.
“Yo a un reality no vuelvo nunca más. Me subo a un camión, llevo verduras. No tengo drama. No le hago asco a nada. Yo siempre digo que no le hago asco a nada, vivo todas las vidas en una, siempre abierto y con el lema de que hay que hacer. Ahora, a un reality no vuelvo nunca más. Me llevó a un límite. Ya crucé el charco o salté el paredón, llamalo como quieras”, aseguró el Loco Montenegro, mientras destacaba la cantidad de amigos que se había hecho.