Natalie Weber (32) abrió su corazón en una nota con la revista Paparazzi, que la tiene como protagonista de su tapa, donde cuenta: “Ya no puedo volver a ser mamá”.
La panelista de Incorrectas y esposa de Mauro Zárate (32), con quien es madre de Mía (7) y Rocco (4), superó un tumor reiterativo de pecho y decidió ligarse las trompas por recomendación médica.
“Cuando terminé con todo mi tratamiento de la enfermedad, los rayos no me permitían ser mamá por dos años. La radiación en el cuerpo sigue estando, y en ese momento mi médico optó por ponerme un DIU. No el que contiene hormonas porque es algo que no puedo recibir en el cuerpo, sino el clásico, de cobre”, relató la modelo a la revista.
Pero el DIU le generó infecciones y el médico le dijo que el único método anticonceptivo que podía usar era la ligadura de tromas: “Me dijo que no podía usar pastillas anticonceptivas, que el DIU que tiene hormonas tampoco, y lo único que quedaba era la ligadura de trompas, pero que era, obvio, algo irreversible”.
"Ya recomendación del doctor fue lo de la ligadura, para no arriesgarme. No lo tuve que pensar mucho. Ante la duda de poder llegar a generar otro problema, decidí esto"
“Dos años atrás, el médico me había dicho que podía volver a ser mamá”, aseguró. ¿Por qué cambió la situación? “En ese momento no me quisieron caer con el peso encima de toda la información junta. No iba a ser justo. Además, lo mío era un cáncer reiterativo, porque me volvió. Y la recomendación del doctor fue lo de la ligadura, para no arriesgarme. No lo tuve que pensar mucho. Ante la duda de poder llegar a generar otro problema, decidí esto”, aseguró Weber.
“Si bien te sacan toda la glándula, células siempre quedan. Y un embarazo, donde las células y hormonas recorren el cuerpo constantemente, es peligroso. No está contraindicado, ojo. Pero en mi caso, teniendo dos hijos, una familia armada, no correría ningún riesgo”.
De todas maneras, Natalie no descarta en un futuro la opción de subrogar un vientre para agrandar la familia: “A mí me quedó una espina de no poder tener otra nena y le dije a Mauro que, el día de mañana, nos podemos ir a otro país y hacerlo a través de un vientre subrogado”.