Durante muchos años, Rodrigo Tapari (35) padeció una fuerte adicción al alcohol, y eso afectó de forma directa a toda su familia, hasta que tocó fondo y pudo sanar. En medio de su recuperación de un día a la vez, el excantante del grupo Ráfaga participó de ¿Quién quiere ser millonario?, donde se fue con 180 mil pesos luego de errar la respuesta por los 300 mil.
Con absoluta sinceridad, el músico que conoció la fama y el éxito durante 14 años habló sobre cómo lo salvó la fe y la reacción de su hija. “Venía con una vida bastante desordenada, estaba con un vicio muy grande que es el alcohol. Pero después de tantas cosas malas que pasaron, hoy están mi mujer, Antonella y mi hija, Luciana, presentes en el estudio. Hemos vivido muchas cosas muy feas, uno comete muchos errores humanos por la naturaleza del hombre. Me encontré en un momento de mi vida bastante triste para mí, que fue ver a mi hija de seis años pedir ayuda. Ese fue mi quiebre, ahí me pregunté qué estaba haciendo con mi vida, de qué manera quería seguir, si estaba haciendo bien o lastimando. Ver a mi hija pedir ayuda a un extraño porque nosotros (con mi mujer) discutíamos mucho; ella nos quería separar y no la escuchábamos. Eso fue el quiebre, decir ‘¿qué hago?’”.
"Ver a mi hija pedir a un extraño porque nosotros (con mi mujer) discutíamos mucho, nos quería separar y no la escuchábamos. Eso fue el quiebre, decir ‘¿qué hago?’”.
Luego, explicó cómo fue que se acercó a Dios: “En una gira con Ráfaga en Miami vi a unos primos y en ellos vi el reflejo de la familia que quería y les pregunté cómo lo lograron. Me dijeron que habían llegado a Miami peor que yo, pero me invitaron a la iglesia y fue un antes y un después”.
Al final, Rodrigo Tapari confesó que intentó suicidarse en dos oportunidades: “Tenía todo lo que había soñado, pero no era feliz. Intenté suicidarme dos veces porque pensé que esa era la solución, y tenía una voz en la cabeza que me decía que lo haga. Pero Dios llegó a mi vida y eso ya pasó”.