La decisión de Matías Martin (48) de separar a Cabito (48) del equipo de Basta de Todo tras 16 años juntos motivó un gran escándalo, primero por las fuertes declaraciones del humorista, y luego por la polémica que se instaló en las redes sociales entre los oyentes del histórico ciclo de FM Metro. Muy enojado por quedar supuestamente como el "malo de la película", el conductor contó su verdad al aire y terminó su carta abierta con su voz quebrada por las lágrimas.
Sus frases más fuertes:
-"Me parece muy injusta y dolorosa, y me obliga a defenderme porque me siento atacado. Y que se está instalando como verdad algo que no es ni por asomo lo que estuvo sucediendo".
"No es que acaba de descrubrírsele una adicción a Cabo, que lo abandonamos en su peor momento. No es nuevo, lo acompaña desde que lo conozco, hace 13 años y siempre estuve junto a él, siempre combatí la discriminación. El convive con esto con muchas dificultades, y también los que están alrededor de él viven y sufren dificultades".
"No es que acaba de descrubrírsele una adicción a Cabo, que lo abandonamos en su peor momento. No es nuevo, lo acompaña desde que lo conozco, hace 13 años y siempre estuve junto a él, siempre combatí la discriminación".
-"Hace tres años su deterioro y grado de abandono se hizo insostenible. Algunos lo recordarán, era fin de 2015, principios de 2016. Fuimos muchos los que intentamos ayudarlo, pero por supuesto que no es fácil, él no se deja ayudar, se enojaba cuando lo encarábamos y hasta se ponía irascible sobre todo con la gente que más lo quería y más cerca estaba. No conmigo, por eso me sorprende un poco el ataque personal".
"Hace tres años su deterioro y grado de abandono se hizo insostenible".
-"Me acuerdo la vez que armamos una reunión de producción y cuando llegó se enteró de que era falsa. Era una emboscada, había amigos muy queridos de él por fuera de la radio y médicos. El objetivo era que se trate de una vez, con o sin internación, con el apoyo del programa y de todos los integrantes. Llegó un punto en que las redes sociales nos atacaban a nosotros, nos decían que no lo cuidábamos, que lo internemos. Me llené de dudas. ¿Me correspondía a mí hacerme cargo? ¿Era yo el que tenía que tomar la decisión?".
-"Su estado al aire era realmente triste, nunca quise contarlo siempre quise otra despedida para no tener que contar, pero no se le entendía cuando hablaba. Él se enojaba mucho cuando un oyente le decía que no lo entendía, pero era la verdad. Tenía severos problemas para movilizarse y se quedaba dormido al aire. No fue una vez, fueron muchas".
"Su estado al aire era realmente triste, nunca quise contarlo siempre quise otra despedida para no tener que contar, pero no se le entendía cuando hablaba, Él se enojaba mucho cuando un oyente le decía que no lo entendía, pero era la verdad. Tenía severos problemas para movilizarse y se quedaba dormido al aire. No fue una vez, fueron muchas".
-"Finalmente, decidí hacer algo por él y lo saqué del programa. Le dije que así no podía salir al aire. Que se estaba dañando, que se interne, que se opere, que haga algo. Que así no podía seguir".
"Finalmente, decidí hacer algo por él y lo saqué del programa. Le dije que así no podía salir al aire. Que se estaba dañando, que se interne, que se opere, que haga algo. Que así no podía seguir".
-"La médica que Daniel Tognetti y Cabito tenían en común le dijo a Dani que estaba muy preocupada por Cabito, que se iba a morir, que estaba muy mal y que había que hacer algo. Que Cabito le había dicho que no se operaba porque no tenía tiempo, que estaba muy ocupado, que tenía mucho trabajo y que no podía. Entonces le pedí a Tognetti que me dé el teléfono de la doctora, la llamé y le expliqué que era mentira, que no estaba muy ocupado, que tenía tiempo, no tenía trabajo en ese momento y que la operación era ahí. Ella estaba muy preocupada por el secreto profesional y le iba a decir a Cabito que Tognetti le dijo todo esto".
-"Se operó y estuvo casi seis meses ausente, y lo acompañamos. Siguió cobrando el sueldo siempre, contó con el apoyo de toda la radio. Lo acompañamos. Regresó y continuó la recuperación al aire, y también lo acompañamos. Recién ahí, lo que consideré su mejor momento de salud en los últimos tres años, volvimos a hablar de lo artístico, de lo profesional. Hablé del personaje que hace al aire, de cómo estaba desgastado, cómo le costaba encontrar su lugar, que estaba cada vez menos participativo, de que lo escatológico ya no quedaba bien, no funcionaba, que queríamos otro tipo de humor dentro de un programa que aprende y evoluciona. Que tenía que reinventarse y redefinir su personaje, encontrar sus momentos, formas de hablar, un tipo de humor nuevo. Que apueste por el chef".
"Se operó y estuvo casi seis meses ausente, y lo acompañamos. Siguió cobrando el sueldo siempre, contó con el apoyo de toda la radio. Lo acompañamos. Regresó y continuó la recuperación al aire, y también lo acompañamos".
-"Las relaciones personales entre él y la mayor parte del equipo estaban desgastadas o rotas. Con Diego, que eran amigos, de repente ya no tenían más onda. Y tanto con Emi como con Juan, que son puntales de este programa, el vínculo era escaso, mínimo. ¿Por qué se distancian Diego y Cabito? No cuenten conmigo para hablar de estas cosas".
"Las relaciones personales entre él y la mayor parte del equipo estaban desgastadas o rotas".
"Lo que estaba claro es que él quedó agarrado de mí, porque era el que estaba más cerca, y de mi familia. Yo era el que más lo bancaba y quería. Por eso me quedé sorprendido con el ataque personal. Le dije que haga algo, porque no hacía nada. Tiraba el ancla, metía tres bocadillos y se iba a su casa. Que proponga secciones. Le di muchas oportunidades. Nunca quise contar esto al aire para cuidarlo. Le dije que se despida bien, que se muestre con proyectos que lo íbamos a promocionar. No pudo o no supo cómo y lo transformó en este ataque. La explicación que me dio fue que lo llaman de los programas y que tiene que conseguir laburo. Por eso centralizó todo en mí, porque le rendía más en términos de escándalo".
"Le dije que haga algo, porque no hacía nada. Tiraba el ancla, metía tres bocadillos y se iba a su casa. Que proponga secciones. Le di muchas oportunidades".
-"Dio una nota a un diario en la que trató de hacerme daño directamente. Todavía me cuestra creer esa nota. Dio a entender que lo abandoné y es falso. No lo puedo permitir más. Me obliga a defenderme y a decir todo esto".
"Dio una nota a un diario en la que trató de hacerme daño directamente. Todavía me cuestra creer esa nota. Dio a entender que lo abandoné y es falso. No lo puedo permitir más. Me obliga a defenderme y a decir todo esto".
-"La decisión que tomé era difícil porque sabía que le iba a costar aceptarla y temía que quiera salir a dañarme. Hoy por hoy lo rompió todo. Había convencido a la radio de que lo ponga en un programa para que tenga un programa propio los fines de semana. Hoy convivo con el enojo de los dueños por defenderlo".
-"Me parece increíble tener que salir a explicar que no soy una mala persona".
-"A vos, Cabo. Me atacaste, buscaste dañarme por una decisión profesional y te expliqué punto por punto cara a cara. Mi consejo es que vuelvas a acercarte a la gente que más te quiere y más te ayuda. Dejate ayudar. Nunca se van a poder resolver los problemas en los programas de chimentos. Se resuelven mano a mano, hablándolos. Estoy muy dolido por lo que hiciste, por más que por WhatsApp me digas que la pifiaste y que si pudieras volver el tiempo atrás... ¡Ya está! No voy a dejar de quererte por ese error que cometiste y del que sos el que sale más lastimado. No tengo ninguna duda. Sólo quería que tengas una despedida a la altura de todo lo que le diste al programa, por las risas y los grandes momentos compartidos. Un cierre digno del cariño que siempre nos tuvimos".