El miércoles al mediodía, Rocío Gancedo tomó la dramática decisión de quitarse la vida arrojándose desde el balcón de su departamento, ubicado en el quinto piso del edificio de Baez 283, en el barrio porteño de Las Cañitas, donde vivía sola. Cinco días antes, la joven surgida de Gran Hermano 2011 había publicado un fuerte mensaje en una cuenta de Instagram que había abierto el 1° de noviembre, y que contaba con pocos seguidores.
“Si dejás todo en las manos de Dios, verás la mano de Dios en todo”, reza la reflexiva frase que Gancedo compartió el viernes 24 de noviembre. Meses atrás, la exmodelo había cerrado sus cuentas de Facebook e Instagram, y sólo utilizaba la de Twitter, donde a principios de noviembre anunció su vuelta a Instagram. En este lapso hizo siete posteos. La última postal la subió el sábado 25 y la retrataba sonriente junto a su sobrina. “Mi amor. Sobri. Love. Good night (Buenas noches)”, había comentado Rocío en la imagen.
Además, en su biografía de Twitter la modelo había destacado un versículo de la Biblia del profeta Isaías, del Viejo Testamento. “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”, dice el texto que ella había decidido destacar.