El Hotel de los Famosos 2 contará con Fernando Carrillo como estrella internacional, y lejos de relajarse el galán se mentalizó para ganar el reality que comenzará el lunes 9 a las 22.30 por eltrece.
Frente al reto de convivir con 15 desconocidos, Carrillo admitió ante Ciudad que vio "la primera temporada que ganó Alex Caniggia" y por eso aseguró: "No creo que sean muchas las cosas que me saquen de quicio".
"Estoy acá, haciendo cosas que nunca hice. La convivencia sin dudas es el reto más grande, pero estoy contento, feliz, en un buen momento de la vida y quería volver a Argentina", continuó en un diálogo relajado Fernando, quien está en pareja con una cordobesa.
-¿Por qué dejaste tu paradisíaco hogar en Tulum, la Riviera Maya de México, para internarte en un reality extremo en Buenos Aires?
-La razón principal es el amor inmenso que le tengo a Argentina y las ganas gigantes que tenía de reencontrarme con este país.
-¿Cómo estás físicamente para competir con chicos 20 años más jóvenes?
-Desde que llegué a Argentina me estoy entrenando en Vicente López frente al río, con diferentes tipos de entrenamientos, para tratar de estar lo mejor posible. Pero soy consciente de que soy de los mayores del grupo. Ya veremos la estrategia que más le conviene al equipo porque quizá no pueda protagonizar los desafíos si hay compañeros que puedan hacerlo mejor. Armar equipo es lo más importante.
-¿Cómo te ves de amo de casa? Porque es posible que tengas que limpiar un baño preparar un desayuno, hacer una cama...
-No es lo que más hice en mi vida normal, pero siempre dije que si me tocara ser barrendero, sería el mejor. Siempre me gusta dar lo mejor de mí. Si me toca ser staff que los huéspedes sean generosos con la propina.
-¿Vas a montar un pesonaje? ¿O te vas a animar a soltarte...?
-No sé si es una de mis virtudes o defectos, pero siempre van a verme transparente. Y no sé si es lo mejor. Pero voy a decir las cosas que siento y tengo en el corazón, de verdad. Espero que me acepten y quieran como soy. Porque soy anticaretas y creo que el mundo está muy pendiente de la careta, hacer lo correcto y yo siento, vibro y soy honesto en mis relaciones, y lo voy a seguir siendo.