Aunque habían dado el gran paso actoral gracias a Chiquititas de la mano de Cris Morena, sin dudas, Rebelde Way puso a Felipe Colombo, Camila Bordonaba, Luisana Lopilato y Benjamín Rojas en el centro de la escena.
En 2004, tras dos años en la pantalla chica, la tira juvenil llegó a su fin. Mientras los protagonistas siguieron pisando fuerte en el mundo del espectáculo, Camila decidía alejarse para siempre de los medios masivos de comunicación. Armó las valijas, se instaló en el sur junto a otros artistas y comenzaron todos juntos a trabajar en un centro cultural.
"Ella siempre ha sido muy particular y ha tenido una energía especial. Es de llevar a cabo lo que se le ocurre desde la ética”.
Aunque Cami ya no tiene relación con el mundo de la actuación, sigue en contacto con Felipe. En diálogo con Por si las moscas, que se emite por La Once Diez/Radio de la Ciudad, el actor habló de su especial vínculo con la exactriz.
"Ella y Benja son los padrinos de mi hija".
"Ella siempre ha sido muy particular y ha tenido una energía especial. Es de llevar a cabo lo que se le ocurre desde la ética”, expresó Felipe. Y reveló: "Ella y Benja son los padrinos de mi hija".
Además, el actor añadió que la ve cada vez que viaja al sur, donde su amiga vive en comunidad con otros artistas. Y aunque también sigue en contacto con los demás, no se juntan seguido por cuestiones laborales: "Hay veces que no nos podemos ver por los trabajos de cada uno”.