Estas últimas semanas, la salud de Santiago Bal (83) empeoró y tuvo que ser internado en la clínica de rehabilitación IMAC, tras las repetidas internaciones que sufrió luego de sufrir una grave infección pulmonar y un severo cuadro de deshidratación.
Muy preocupado por su papá, Federico Bal visitó Intrusos y, además de hablar sobre cómo se siente el director y comediante, reveló cuál fue el pedido que le hizo en la última -y profunda- charla que tuvieron mano a mano.
"Mi viejo tuvo de todo, pero estaba de pie por la fuerza. Y esta vez, ya era distinto. Era como que no sentía las ganas de estar bien. Solo quería estar en la casa de mi vieja. Es más, dijo: 'Quiero morir ahí, déjenme ahí'", contó Federico y aclaró que su mamá, Carmen Barbieri, es la única que "sabe" cómo cuidarlo.
"Mi viejo tuvo de todo, pero estaba de pie por la fuerza. Y esta vez, ya era distinto. Era como que no sentía las ganas de estar bien. Solo quería estar en la casa de mi vieja. Es más, dijo: 'quiero morir ahí, déjenme ahí'",
Si bien Federico tiene fe en que su padre se recupere, aclaró: "Que hoy tenga 83 años es casi un milagro". Y antes de cerrar, confesó que lo preocupaba muchísimo que el hombre bajara los brazos y se rindiera ante sus problemas de salud: "Al principio sentíamos que estaba bajando los brazos. Pasamos días muy complicados. La temporada de verano lo agotó, pero era lo que él quería hacer. Al artista lo sacás del reflector y se empieza a apagar".