La confesión de Emilio Disi (74) sobre su lucha contra un cáncer de pulmón, fue con la intención de remarcar que la suya es una batalla que piensa vencerla con la herramienta fundamental de su carrera: el buen humor.
"Me lo diagnosticaron por una neumonía. Iba al sanatorio, me hacía los chequeos y me volvía para casa. En uno de los estudios, saltó que había un tumor. Y ahí arrancó todo".
“Voy a ser sincero: la estoy pasando con mucha buena onda y con ganas de enfrentar la enfermedad. No le voy a escapar al bulto; le quiero ganar al cáncer. Esto es una cuestión de optimismo y buena onda o pesimismo y mala onda”, aseguró Emilio en una nota para la revista Pronto.
“Me lo diagnosticaron por una neumonía. Cuando tenés neumonía, te internan si estás con fiebre y si no estás con fiebre, directamente no te internan. En mi caso, fue ambulatorio: iba al sanatorio, me hacía los chequeos y me volvía para casa. En uno de los estudios, saltó que había un tumor. Y ahí arrancó todo”, relató el actor que encontró en su mujer, Elvira, sus hijos y sus nietos el apoyo para transitar la enfermedad.
"Los días posteriores a la quimio te querés matar. Te da nauseas permanentemente, perdés el gusto, no le sentís el sabor a la comida. Te saca las ganas de comer. En estos 20 días, bajé 14 kilos".
“Mucha gente me empezó a preguntar qué tenía y podía haberme hecho el boludo y responder ‘no se sabe, no sé, me estoy haciendo chequeos’. Pero me hinché las pelotas y me pregunté ‘¿por qué tengo que esconderme? ¿Qué es esto? Tengo que decir la verdad’. A los que me preguntaban les decía ‘tengo cáncer de pulmón’”, reveló.
“Por suerte agarré la enfermedad muy a tiempo y no había metástasis en ningún lado. Solamente está en el pulmón. Pero es una enfermedad tan hinchapelotas que no te lo puedo explicar. No me duele nada por los tranquilizantes que me dan. No sufro dolores terribles salvo cuando me toca hacer quimioterapia. Ahí si aparecen unos dolores que no sentí nunca en mi vida. Pero es sólo uno o dos días y después se pasa”, relató Emilio. “Los días posteriores a la quimio te querés matar. Te da náuseas permanentemente, perdés el gusto, no le sentís el sabor a la comida. Te saca las ganas de comer. En estos 20 días, bajé 14 kilos. Ya no tengo tanta panza. La quimio te saca el hambre y no podés más. Te ponés la comida en la boca y le sentís gusto a medicamento”, afirmó Emilio Disi sobre su lucha. Una lucha que ya empezó a dar y piensa ganar.
¡Vamos, Emilio!