Desde su primera aparición en MasterChef, Francisco Taberna dejó en claro que no iba a pasar desapercibido en la competencia. Su plato conmovió hasta las lágrimas a Donato De Santis y poco a poco se convirtió en uno de los favoritos del público para ganar el juego. Y aunque su sueño en el programa se terminó, el carpintero compartió una dolorosa historia personal.
"¡Vamos todos para que alguna obra social se digne a querer tomarme y pueda realizarme el by pass gástrico! ¡No discriminen a los gordos, hagan cumplir la ley!", exclamó.
"Me hubiera encantado ganar porque con la plata del premio me iba a hacer el bypass gástrico, ya que no tengo obra social y no puedo realizarme el tratamiento por mis propios medios. Cuando quedé eliminado me desilusioné, pero no pierdo las esperanzas de poder hacerlo en algún momento", contó en una entrevista en Pronto.
Desde las redes sociales volvió a repetir el pedido para mejor su calidad de vida: "¡Vamos todos para que alguna obra social se digne a querer tomarme y pueda realizarme el bypass gástrico! ¡No discriminen a los gordos, hagan cumplir la ley!", exclamó en su cuenta de Facebook.
Pero Francisco no pierde la esperanza y en la publicación contó cuáles son sus expectativas en el mundo culinario: "Me gustaría hacer un programa de cocina y tener mi propio catering para eventos. Además, mi hobby son los embutidos, así que me gustaría tener una marca propia de delicatessen", dijo, esperanzado.