El mal momento quedó en el pasado y Diego Brancatelli pudo reincorporarse al panel de Intratables (América) a casi un mes de haber estado internado en el Sanatorio La Trinidad por coronavirus. En ese entonces, los médicos habían decidido internarlo porque su cuadro se complicó y tuvo que hacerle frente a una neumonía bilateral.
De regreso al programa, el panelista contó cómo atravesó el covid junto a su esposa, Cecilia Insigna, y reveló por qué finalmente decidió internarse en una clínica privada y no en un hospital.
"El lunes me levanté con fiebre, 39,5. Estaba transpirado y mareado, agitado, no tenía aire. Agarré el auto y llamé a Omar Recchi, es mi doctor de cabecera, él es el director del Hospital de Capilla (del Señor). Yo estoy cerca, en Pilar. Había ido al hospital de Sanguinetti de Pilar. Ustedes saben de la discusión (en redes)... Siempre me traté en hospital. Me hacen una tomografía y el doctor Recchi sale más pálido que yo. Me atendieron entre tres doctores porque estaba mal. Tenía una neumonía bilateral y no sabían cómo decírmelo”, contó el periodista, fiel defensor de la salud pública.
Y cerró detallando el motivo por el cual lo internaron en el Sanatorio La Trinidad y no en el hospital. "Ahí yo decido con Cecilia, mi esposa... Ya que me habían ofrecido en Pilar y en Exaltación de la Cruz cama y lugar para dejarme internado, decirles que no, que la prepaga se haga cargo. No quería sacarle la cama a alguien de la sociedad. Hablé con la gente de Galeno y me internaron. Era por 48 horas porque me faltaba el aire. Terminé por cinco días porque al tercer día un análisis de sangre y un eco doppler en las venas, que dio que, en vez de ir normalmente se movía en forma de remolinos y eso podía provocar una trombosis”, cerró.
Antes de su descargo en Intratables, el comunicador ya había aclarado la situación a través de sus stories de Instagram remarcando que antes de recurrir a la medicina privada se había atendido en hospitales.