Se ganó el cariño del público gracias a la impronta que le imprime a sus conducciones de Desayuno americano todas las mañanas. Además, es bella por donde se la mire… pero no todas las críticas fueron buenas para Pamela David (37) desde que optó por cambiar su look en los últimos días.
El primero en dar su opinión fue el panelista del ciclo de América, Luis Novaresio, quien desaprobó el flamante estilo con extensiones de la conductora: "Usted está siempre muy linda, pero eso da a peluca. Cuando se peina con el pelo engominado para atrás es mucho mejor”, había advertido el periodista.
La crítica parece haber calado hondo en Pamela, ya que en la tarde de este jueves, cuando fue como invitada al piso de Infama, se la vio peinada tal como le marcó su compañero. Pero allí tampoco convenció a las miradas más filosas...
En medio de una profunda entrevista, que contó con una conversación telefónica con su mamá y su tía -en el día de sus cumpleaños-, Pamela mantuvo un desopilante ida y vuelta con sus hijos. El primero en tomar la palabra fue Felipe (8), fruto de su relación con Bruno Lábaque.
En ese momento, Pía Shaw hizo pregunta que desató una charla imperdible: “¿Felipe cómo la estás viendo a mamá, está divina?”.
Felipe: -Sí.
Pamela: -Decí la verdad. ¿Qué me dijiste del pelo antes de venir, hijo?
F: -Que estabas horrible.
P: -¿Y ahora te gusta tirado para atrás o también está horrible?
F: Un poco, pero con la colita… no. ¡Que se lo corte, que se lo corte!
P: Es que tiene impunidad total conmigo, me dice lo que quiere. ‘Mamá, estás gorda’, te dice.
Pero eso no fue todo. Su otra hija, Lola (3), a quien tuvo con Daniel Vila, también quiso hablar con su mamá, aunque en su caso fue más benévola: “Estás linda, ma”, remarcó.
En medio de la entrevista, Pía volvió a hablar con Felipe y le pidió que termine con algún comentario: “Tus amigos te deben decir, 'qué linda mamá que tenés', ¿o no?”, indagó.
A lo que el niño remarcó: “Sí, lo único que no me gusta de ella es su pelo”.
Por último, David confesó que su peinando no fue bien recibido en el círculo familiar: “Yo me despierto y a la mañana el primer comentario de Daniel fue el mismo, hay un boicot… ¡se pusieron todos de acuerdo!”, cerró con una sonrisa.