Guillermo Coppola era más que el manager de Diego Maradona, era un hermano de la vida. Y como a veces pasa con los hermanos, la vida los lleva por caminos distintos por algún enojo o cuenta pendiente. Sin embargo, el destino siempre se encarga de volver a cruzar esos senderos. Y Guillote se enteró de la sorpresiva muerte de Diego al aire de No está todo dicho, el programa de Guido Kazcka, en La 100.
“Prefiero no creerlo. No puedo creerlo. Veo las lágrimas de Guillermo Andino. El mundo y el teléfono que no para de sonar. Una noticia que no puedo creer. Una vida juntos. No se puede creer”, comenzó diciendo el empresario. Atónito como todos, Guido apoyó a su compañero. “Estamos en el medio del duelo, tratando de seguir con las tareas”, comentó el conductor.
"Voy a guardar los buenos recuerdos. Recuerdo al Diego alegre y felíz. Al Diego que lloramos y sufrimos. Va a estar siempre en nuestros corazones. Con las diferencias que podíamos tener. Con sus rebeldías. Algo tenía a su alrededor que lo protegía”, continuó Coppola, quebrado.
"Guardar los buenos recuerdos. Chiquito mío. Siempre era alegre, feliz, ese Diego que nos divertimos, lloramos, que sufrimos.. La cuerda, la cuerda un día se rompe, mucho, mucho tirar de la cuerda... Estoy destrozado, destruido, me imagino sus hijos, sus hermanas, prefiero no creer y pensar que es un sueño", cerró entre lágrimas Guillermo.