Dalia Gutmann compartió un extenso descargo en su cuenta de Facebook luego de la polémica desatada alrededor de Metro y Medio, el ciclo que conduce su marido Sebastián Wainraich con Julieta Pink.
Todo ocurrió el viernes pasado cuando Wainraich no estaba en el estudio al frente de la conducción y su lugar lo tomaron Pink, Pablo Fábregas, Martín Reich y la invitada Tamara Pettinato. En un momento, un oyente llamó al aire y relató un episodio sumamente desagradable: “La última noche me alcoholicé más que los demás días y veo una rubia canadiense tremenda y fui derecho, me tiré de cabeza, la vi de lejos y la tacleé (sic). Cuestión que me encerré en la pieza del hotel y le di duro, duro, duro, y quería preguntarles si fue infidelidad eso”.
Entre quienes alzaron su voz para condenar lo sucedido se encuentra Malena Pichot, quien escribió en Twitter: “Un oyente cuenta que violó a una mujer violentamente. Nadie lo insulta ni nada. Incluso ríen”.
"Creo que nada de esto ayuda a que la sociedad pueda entender realmente lo injusto que es el machismo".
Desde Facebook, Dalia expresó su malestar por lo sucedido y defendió al ciclo de su marido: “Me acuerdo cuando en el último verano, el humorista Sendra publicó un chiste en el que una mujer iba a denunciar a su marido a la comisaría por violencia de género porque le había regalado un espejo. Varias personas salieron ofendidísimas a repudiarlo como si fuera algo realmente gravísimo. Me dio bronca la facilidad de algunos para confundir todo, para mezclar a la gente que es realmente peligrosa, con quienes laburan, construyen con mucho esfuerzo una trayectoria, y hacen su trabajo lo mejor que pueden todos los días”.
“Esta situación se fue replicando. Y este grupito de personas pareciera estar todos los días buscando a quién matar en las redes sociales. Me parece un acto abusivo. Horriblemente abusivo. Sobre todo por la falta de humanidad. Porque difaman injustamente a personas, tergiversan lo que realmente pasó y ensucian gratuitamente a gente que no se lo merece. Y lo peor de todo: confunden la lucha feminista de un modo preocupante”.
"Acusar al programa de lo que se lo acusó en las redes sociales, es de una injusticia que no se puede permitir. Y es de gente mala leche".
“Me parece aplaudible que salgamos a la calle a protestar contra un femicidio, celebro también que las mujeres nos animemos a decir en voz alta cosas que antes nos daban vergüenza. Cuando yo era chica si algún pelotudo te apoyaba en el bondi o te tocaba sin tu consentimiento, nos daba miedo contarlo. Las mujeres ya no nos queremos callar mas. Queremos igualdad de derechos. Parece una obviedad, pero queda mucho por hacer. Por eso me parece tan grave cuando se pierde el foco, cuando hay una falta total de criterio para acusar a alguien de cosas gravísimas, sin siquiera a veces chequear lo que realmente pasó. No quiero dejar de decirlo porque me preocupa tanta confusión. Creo que nada de esto ayuda a que la sociedad pueda entender realmente lo injusto que es el machismo”.
Cuando una seguidora le cuestionó su defensa y aseguró no entenderla, Dalia fue aún más dura: “Me refiero a varias situaciones. Algunas de ellas me tocaron directamente. En el caso de lo que pasó el viernes en Metro y Medio, escuché el audio. Los escuché incómodos a Pablo y a Julieta y no escuché que se hayan reído, al contrario, le preguntaban varias veces si había sido consentido. Además hay que tener en cuenta que no estaba el conductor habitual. Acusar al programa de lo que se lo acusó en las redes sociales, es de una injusticia que no se puede permitir. Y es de gente mala leche. Detesto a los mala leche y quiero combatirlos para que no jodan a la gente que quiere trabajar. Si quieren barro que se peleen entre ellos, pero que no difamen injustamente”.