De los 40 días que Carmen Barbieri pasó internada por covid, 20 estuvo en coma farmacológico. A pesar de su delicado estado de salud, logró salir adelante. Recuperada y agradecida, la capocómica relató el calvario que vivió.
“Fue muy traumático estar en terapia intensiva, cuando salí no podía hablar. Luché para seguir viviendo por Fede, para no darle otro disgusto porque venía de pasar la muerte de su papá, Santiago Bal, y de haberse curado de un cáncer de colon, y el médico le dijo que yo estaba en estado crítico”, contó en Intrusos (América).
Y remarcó que su altísima temperatura la hacía delirar: "Con tanta fiebre no entendía lo que estaba pasando. Estaba totalmente conectada por todos lados. Me ataron la lengua”.
Además de mostrarse muy agradecida con las personas que rezaron para que se recuperara, Carmen se despidió rememorando una experiencia extrasensorial que vivió durante su internación.
"Vi a mi mamá y a una mujer de manto blanco, que para mí era una Virgen. También me recibió una japonesa en una habitación plateada que me decía que era mi nueva amiga y que me tenía que amigar con la muerte. Cuando estaba saliendo adelante, un poco mejor, un día en un ventanal de la habitación apareció un colibrí y golpeó con el pico tres veces el vidrio. Eso se lo conté a Fede y me dijo que deliraba, pero cuando se acercó vio los tres puntitos marcados”, cerró al rememorar su paso por la clínica Zabala.