Orgullosa del nuevo presente de Federico Bal, quien está al frente de 100 argentinos dicen (en reemplazo de Darío Barassi), Carmen Barbieri no pudo evitar quebrar en llanto al mantener un ida y vuelta con su ser más querido.
Antes de terminar la charla, la conductora de Mañanísima (lunes a viernes a las 20 por Ciudad Magazine) quiso despedirse del joven, pero la emoción la invadió hasta las lágrimas: “Te quiero mucho hijo y te admiro. Ay, no me quiero poner a llorar. Soy una tarada”, comenzó diciendo.
“Lo único que lamento, y ya te lo dije, es que tu papá no pueda verte en este rol tan bueno (como conductor). Lo hacés muy bien, te quiero. Ya sé que vos creés que tu papá te acompaña más ahora", agregó.
"Te quiero mucho hijo y te admiro. Ay, no me quiero poner a llorar. Soy una tarada. Lo único que lamento, y ya te lo dije, es que tu papá no pueda verte en este rol tan bueno (como conductor). Lo hacés muy bien, te quiero".
Y cerró, a flor de piel, mientras intentaba recomponerse: “Lloro pero de alegría porque te va a tan bien y sos un gran compañero. Te felicito. Te quiero mucho, hijo. Un beso enorme”.