Brian Lanzelotta vive el momento más duro de su vida luego de la muerte de su madre, por un avanzado cuadro de hepatitis C y tras sufrir una falla multiorgánica.
En medio del dolor, el exparticipante de Gran Hermano 2015 estuvo como invitado al piso de Intrusos, acompañado por su novia Marian Farjat, y habló de su difícil presente: “Estaba volviendo de Corrientes y me desayuné con la noticia. Creo que nadie se lo esperaba, menos nosotros. Luchó y peleó hasta donde pudo. Pensamos que quedaba una esperanza, que iba a salir e iba a poder volver a mi casa con nosotros, pero por algo pasan las cosas, dicen. El tiempo capaz que cure las heridas y sane todo, ¿no?”.
Luego, se refirió al estado de salud que presentaba Miriam: “Estaba muy comprometida, tenía una enfermedad que era terminal y tenía muy comprometido el hígado y necesitaba un trasplante. Por eso la trasladaron, pero no aguantó, no llegó. También ya le venían funcionando mal los riñones y había que hacerle diálisis y le empezó a funcionar más el corazón y a complicarse más el cuadro. La noticia me la dio mi hermana por teléfono”.
Además, se quebró al hablar de su hermano Carlitos, quién nació con una discapacidad psicomotriz provocada por la falta de oxígeno a su cerebro: “Lo que va a pasar con él es una pregunta que me la hago yo y todos mis hermanos, ¿cómo seguimos? Él es un sube y baja con sus sentimientos. Por momentos está en su mundo y por momentos cae en la realidad y hay que volver a llevarlo a su mundo, que es donde está tranquilo. Es muy inteligente. No me animé a darle la noticia, fue mi hermana la que le dijo y se puso mal. Al rato se tranquilizó”.
“Creo que mi mamá nos preparó el camino. Dentro de todo lo malo, algo bueno tenés que sacar y yo estoy tratando de hacer eso. Todas la noches, cuando me acuesto o el momento en el que me quedo solo, trato de ver lo bueno, que me vio llegar adonde yo quería, donde ella quería que yo esté. Ahora no me puedo quedar y tengo que seguir por ella y por mis hermanos”, agregó.
Por último, el cantante reconoció: “No caí todavía. Hace una semana atrás estaba armándole la pieza para que, cuando ella saliera del hospital, se encontrara con algo lindo. Y hoy miro la pieza y ella no está. Tenía 55 años”, cerró con lágrimas en los ojos.