Lo que todos preveían, sucedió: Bradley Cooper e Irina Shayk se separaron tras una crisis de pareja que se habría acentuado en los últimos meses, particularmente luego de la entrega de los Oscar.
Es que durante la ceremonia, la impresionante química entre el actor y Lady Gaga quedó a la vista de millones de televidentes, que siguieron la emocionante interpretación que hicieron a dos voces de Shallow, la canción de Nace una estrella, el film que coprotagonizaron.
Mientras tanto, desde la platea, la ex de Cristiano Ronaldo siguió la escena a cara de piedra.
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Y si bien Lady Gaga se encargó de explicar en su momento que si la gente había visto amor era porque ellos lo habían querido así, las versiones de que había “algo más” entre Cooper y Gaga no hicieron más que crecer.
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Finalmente, la revista People confirmó que Cooper y Shayk están en tratativas para compartir la custodia de su hijita de dos años, Lea De Seine. Y a pesar de que ninguno de los dos aún se pronunció, aseguran que a la modelo se la vio salir con una valija de la casa que compartía con el actor hasta este jueves.
"Las cosas no están bien entre ellos. Ninguno de los dos es feliz. La relación pende de un hilo", dijo una persona cercana a la pareja días atrás y explicó que si seguían juntos era por su hija.
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