Argentina, tierra de amor y venganza está en su tramo final y las historias de esta popular tira de época empiezan a resolverse.
En diálogo con Por si las moscas, programa radial de La Once Diez, Leo Calderone, uno de sus autores, dio algunas pistas de cómo terminará la novela de eltrece que creó junto a Carolina Aguirre.
“Nosotros tenemos muchos finales. Más que el final que la historia principal, que también se resuelve, hay que resolver a todos los personajes. Algunos los fuimos definiendo sobre el final", le dijo Calderone a Moskita Muerta y Nilda Sarli.
En relación a cómo será el destino de cada personaje hacia el desenlace, el guionista señaló como premisa el tema de la venganza como "el leit motiv del programa". "Incluso los villanos creen que tienen derecho a vengarse. Así que luego de su caída, Torcuato renacerá y sentirá que tiene que vengarse también él. Hay algo de la venganza que va a ir hasta el final y está muy atado a la historia de amor”, aclaró.
En cuanto a la pareja favorita de los fanáticos de la tira, la de Bruno (Albert Baró) y Lucía (Delfina Chaves), indicó que, para su última etapa, con su co-equiper querían "más realismo". "Se corrió el problema de Torcuato, que era una historia más de cuento. Ahora está el tema de que Bruno rearmó su vida con otra persona, pero todavía quiere a Lucía, y ahí hay un triángulo difícil de romper”, explicó.
También se refirió a la evolución del personaje que interpreta China Suárez, Raquel, inspirada en la inmigrante polaca Raquel Liberman: “Su vida es muy sufrida. Ya no es la misma que llegó en el barco; ya es una mujer fuerte, que tiene sus propias determinaciones".
Además, dejó abierta la posibilidad de continuar con la historia en una nueva temporada de ATAV porque "le fascinan los años sesenta" y porque cree que la historia de Raquel, Aldo, Bruno y otros más podría continuar a través de algunos personajes, de sus hijos y de algún tema del pasado.
Sin embargo, el autor dijo que esta continuación debería realizarse con nuevas historias: "De esta ya hicimos doscientos capítulos”. Y aclaró que, de darse una nueva entrega de la novela, debería seguir con el formato de ATAV: "Un culebrón, con mucha profundidad y temas importantes, recreación de la época y un elencazo”.
“Por ahora es una idea", comentó. Y cerró: "Pero si se hace, estaré encantado”.
¿Continuará?